El Ayuntamiento de Ribes intensifica el control y las sanciones por las cacas de perros

Con el objetivo de que las personas propietarias de los perros recojan los excrementos de sus animales en la vía pública y se cumplan las ordenanzas de tenencia de animales domésticos y general para la convivencia y el civismo en este ámbito, el Ayuntamiento ha relanzado la campaña "¡Las cacas de tu perro las tiene que recoger! Hacerlo no cuesta nada. No hacerlo cuesta caro" coincidiendo con la colocación de 200 señales cívicas informativas en calles, parques y plazas, que recuerdan mayoritariamente la obligatoriedad que tienen las personas que pasean perros de recoger las defecaciones de los animales y de conservar el espacio público, y que en caso de no hacerlo pueden ser multados. Las sanciones no sólo se aplicarán por no recoger las cacas sino que, además, otros aspectos recogidos en la normativa municipal que se incumplan (como que no vayan atados o, según su tipología, no vayan con bozal), pueden hacer ascender las multas de los 250 a los 1.000 euros. La campaña se reforzará con la intervención de la Policía Local, que intensificará la vigilancia en todo el municipio y especialmente en aquellas zonas o puntos calientes donde ha detectado un mayor grado de incumplimiento de la normativa relacionada con la tenencia de animales. El año pasado se levantaron un total de 55 actas, que dieron lugar a la incoación de 32 expedientes sancionadores, y 62 infracciones sancionadas. En lo que llevamos de 2018, ya se han realizado 14 actas que dan lugar a la incoación de 8 expedientes sancionadores, con un total de 20 infracciones sancionadas. El año pasado el Ayuntamiento aprobó una ordenanza general para la convivencia y el civismo a través de la cual se quieren fomentar valores propios de una cultura cívica, tolerante y respetuosa con los demás y nuestro entorno; regular conductas de la ciudadanía vinculadas con la convivencia y el civismo; y el establecimiento de un programa de medidas alternativas a la sanción económica que fomente una política reparadora y educativa de cara a la ciudadanía y tareas comunitarias. Como ha explicado la alcaldesa, Abigail Garrido, "estas sanciones, que también se prevén en la ordenanza cívica, pueden ser no sólo económicas sino también con trabajo comunitario" y ha remarcado que "es una línea importante de sensibilización hacia las personas para que se den cuenta de que la comunidad va más allá de la puerta de casa de cada uno, ya que la comunidad justamente la hacemos en el espacio público y tenerlo en condiciones nos ayuda a todos y todas". Para recordar los diferentes aspectos esenciales referentes a las obligaciones de las personas tenedoras de animales domésticos, por un lado, y de perros con raza tipificada como potencialmente peligrosa, por otro, se ha reeditado un folleto informativo y carteles que repartirán los agentes cívicos y que se distribuirán en centros veterinarios y establecimientos comerciales con venta de productos para animales con la colaboración de personal técnico de la Mancomunidad. En esta publicación se recuerda, además, que existen zonas específicas o áreas de recreo para los perros donde pueden ir sueltos y que los excrementos deben recogerse en todas partes, también en los espacios verdes y naturales, pues no se pueden considerar abono. Igualmente, deben estar debidamente identificados con un microchip homologado que implantan los centros veterinarios y registrados en el censo municipal de animales de compañía. Tener un perro en casa (o cualquier otro animal) debe evitar molestias al vecindario y en ningún caso se pueden alojar habitualmente en balcones o terrazas. La imagen y mensaje de la campaña se podrá ir viendo en los espacios publicitarios de las paradas de bus, así como en algunos medios de comunicación, a modo de recordatorio. Ya desde primeros de año, se ha ido difundiendo en los programas de Fiesta Mayor o de otras revistas locales.