Tengo el placer de comunicar que recientemente he reeditado el libro Súbete al árbol más alto, un trabajo que con la nueva edición se presenta con el subtítulo Autoconocimiento en tiempos de transformación. Hay dos motivos que me han impulsado a reeditar la obra. El primero, porque desde que en 2014 publiqué la primera versión he seguido recibiendo comentarios positivos y muestras de agradecimiento que varias veces han revivido en mí el interés de relanzar la obra.
El segundo motivo, y de hecho el detonante, ha sido el impacto que me ha causado el clima de emergencia sanitaria que ha afectado a nuestra sociedad. Una experiencia que ha expuesto a la mayoría de la población a un clima de miedo y estrés continuados. Yo al principio también tuve miedo, como todo el mundo, pero gracias a la filosofía y a los recursos que comparto en este libro he podido ayudarme a mí misma en momentos tan difíciles.
He ido aprendiendo esta filosofía a lo largo de mi vida, principalmente gracias a la lectura y a la inspiración de muchos autores que menciono en el libro y a quienes desde aquí hago llegar mi reconocimiento por todo lo que me han enseñado. A través de este trabajo intento transmitir una forma de ver y de entender la vida con la que, cuando te comprometes y la integras de verdad, puedes empezar a renovarte mentalmente, conseguir una mente más positiva y así vivir desde una perspectiva mucho más enriquecedora, tanto las circunstancias difíciles de la existencia como los momentos de bonanza y de felicidad.
Esto no son palabras bonitas que ayudan a vender, sino que por mis propias crisis existenciales, así como por mi trabajo como terapeuta acompañando a personas en sus encrucijadas personales, sé que lo que más ayuda, y por tanto lo que más nos protege ante cualquier situación adversa y también ante un posible virus, es nuestra propia actitud. No es lo mismo tener una actitud positiva y de esperanza ante lo que nos pasa que vivir en el desánimo, alimentando pensamientos de miedo y de falta de confianza en el futuro. No es lo mismo querer escapar de una situación, desear que se acabe pronto, que darse cuenta de que es precisamente en momentos de dificultad donde nos hacemos más fuertes. Como tampoco lo es tomar decisiones desde un estado de terror y de preocupación, que tomarlas desde la tranquilidad y la serenidad. Las decisiones que se toman en momentos de miedo y de ansiedad suelen ser las menos adecuadas, las que menos nos convienen y de las que nos acabamos arrepintiendo.
Mientras estuvimos confinados me pregunté: ¿qué podía hacer?, ¿de qué manera podía poner mi granito de arena para conseguir un mundo más sano, más libre y más feliz? Pensé y me dejé sentir, hasta que me di cuenta de que lo que realmente sentía en ese momento era la necesidad de seguir divulgando una filosofía de vida que ayudara a la superación de los problemas personales y que, a la vez, sirviera para replantearnos algunos de los "valores" que hoy imperan en nuestra sociedad.
Así que decidí ponerme a mejorar el texto que había publicado hacía unos años. He pasado unos meses revisando y actualizando las páginas para conseguir esta nueva edición y ahora tengo ganas de compartir el resultado. También con la misma voluntad, en los últimos tiempos he aumentado mi actividad como redactora de artículos de opinión, un formato que siempre me ha gustado y que me permite expresar mi lado más activista.
Este libro no persigue los grandes sueños de un mundo consumista al estilo americano: haz tal cosa y obtendrás el mejor trabajo, una pareja ideal, todo tipo de riquezas materiales, etc. Yo no digo que estos objetivos no sean importantes o no tengan ningún valor; es más, practicando la filosofía de Súbete al árbol más alto todas las áreas personales pueden experimentar cambios positivos. Lo que intento explicar es que, además de las mejoras materiales, me interesa el autoconocimiento como base para poder expresarnos como somos y sentimos, para encontrar el sentido a la existencia y para saber vivir una vida de plenitud y de realización. Y lo que he aprendido, y ahora puedo compartir, es que esto pasa primero por sanar las heridas del pasado, aceptarnos como somos, aceptar la vida como es y aprender a querernos.
Súbete al árbol más alto es una propuesta para mirarnos a nosotros mismos y también mirar la vida que hemos creado… Nos hace reflexionar, nos facilita conocimientos sobre crecimiento personal y algunas sugerencias sencillas para gestionar la actividad mental, las emociones tóxicas, etc. Nos propone tomar conciencia sobre el poder de nuestros pensamientos y de las programaciones que hemos asimilado desde la infancia.
Este trabajo tiene como particularidad que además de centrar casi tres cuartas partes del libro en el proyecto más maravilloso, que es conocernos a nosotros mismos, a la vez es un llamamiento para que tomemos conciencia del momento histórico que estamos viviendo. Nos habla de lo importante que es dedicarnos a nuestro crecimiento interior y de la oportunidad que nos brinda la vida, gracias a todo lo que está sucediendo, de dejar de apoyar a este mundo gris que nos anula y nos despersonaliza, para convertirnos en la fuerza que debe apoyar el cambio de rumbo que necesita nuestra sociedad y el Planeta.
