Una actuación rápida de los Mossos d’Esquadra evitó un final trágico para un perro que había quedado atrapado en una zona rocosa e inaccesible de la playa de Sant Sebastià, en Sitges. El animal se encontraba en un punto donde no era posible llegar caminando.
Los hechos ocurrieron durante una patrulla rutinaria de los agentes marítimos, según ha informado El Caso. Al pasar por la costa de Sitges, detectaron al animal, visiblemente desorientado, aislado en un pequeño acantilado rodeado de rocas, sin ninguna vía de escape.
Ante la situación, los agentes activaron un dispositivo de rescate. Utilizaron una tabla de rescate acuática para acercarse a la zona y escalaron con precaución hasta donde se encontraba el perro. Una vez arriba, uno de los policías cargó al animal sobre los hombros y descendió con cuidado hasta el nivel del mar. A pesar de las dificultades añadidas por las condiciones del agua, con muchas olas, el equipo logró trasladar al perro con éxito hasta la playa.
Ya en la arena, se procedió a la identificación del animal, que llevaba un microchip. Esto permitió contactar rápidamente con su propietario.
Aún no se sabe con certeza cómo el perro acabó en aquel punto tan peligroso, pero todo apunta a que podría haber caído accidentalmente desde la parte superior del acantilado, ya que el acceso por mar era la única opción viable.