El Alcalde de Vilafranca, Pere Regull, acompañado por el concejal de Seguridad Ciudadana, Joan Manel Montfort, y el inspector jefe de la Policía Local de Vilafranca, Albert Romero, ha comparecido este mediodía en rueda de prensa para hacer un llamamiento a la responsabilidad de todos en estos momentos en que "por un lado vemos noticias preocupantes en los medios de comunicación y por otro percibimos una cierta relajación en ciertas conductas de la población".
El alcalde ha advertido que, aunque no haya ingresados por Coronavirus en el hospital de Vilafranca, "no quiere decir que no haya personas infectadas. En el Alt Penedès hay personas que han dado positivo, al margen de que desarrollen o no una sintomatología grave". Pere Regull también ha querido hacer un toque de atención en el sentido de que la media de edad de los infectados ha bajado respecto a la primera ola.
"Los sectores más jóvenes de la población deben concienciarse de que ellos también pueden desarrollar la enfermedad y lo que es más grave, la pueden transmitir a sus padres, abuelos... que pueden ser de sectores vulnerables. Hago un llamamiento a respetar las normas higiénico-sanitarias y aquí la mascarilla es fundamental, tanto para no infectar como para no ser infectado", ha afirmado el alcalde. Regull ha advertido de la dureza de un hipotético confinamiento en el mes de agosto, que sería "mucho más traumático que el que hemos vivido. No nos podemos permitir volver a fases atrás, con la sociedad parada. Debemos extremar las precauciones".
El concejal Montfort ha insistido en que la situación sigue siendo grave y "cualquier rebrote que se pueda dar puede acarrear consecuencias nefastas". Ha explicado que desde el Ayuntamiento se ha procurado facilitar la reapertura de la actividad económica, que las terrazas tuvieran más espacio, etc. "Todo esto conlleva afluencia de gente y es normal. La gente tiene ganas de salir. Pero debemos hacerlo con responsabilidad de todos y cada uno de nosotros. No se puede poner un policía detrás de cada persona", ha dicho Montfort.
El concejal ha hecho énfasis en que desde la administración "se pueden poner las medidas, explicar, advertir, aconsejar... pero es cada uno, en definitiva, quien tiene la última palabra y hay gente que sólo entiende que le pongan una multa". El concejal de Seguridad Ciudadana ha explicado que estos días la Policía Local ha advertido a mucha gente y se ha sancionado a 5 personas por no llevar mascarilla, que eran reincidentes. "A partir de ahora entendemos que la gente está suficientemente informada y entraremos en una fase sancionadora contra las conductas irresponsables", ha dicho.
Los responsables municipales han insistido en el elevado riesgo de contagio que puede haber en fiestas y encuentros donde se hace "botellón" y que serán controladas especialmente por la Policía Local. "No se trata de criminalizar al colectivo de la gente joven, pero aunque crean que esto no va con ellos, su conducta puede acarrear consecuencias graves para sus entornos familiares", remarcaba Joan Manel Montfort.
La Policía Local de Vilafranca ha levantado unas 1.500 actas durante el estado de alarma. Las multas por no llevar mascarilla tendrán una cuantía a partir de 100 euros.