Como muchos otros trabajadores y trabajadoras de un sector considerado como esencial, decidí realizar mis desplazamientos diarios Vilanova i la Geltrú – Hospital Clínic (Barcelona) en coche con el objetivo de reducir el riesgo de contagio. Pues bien, desde entonces y sumado al coste de la gasolina, hay que sumarle los 14€ de peaje diarios que tanto yo como otros trabajadores/as tenemos que pagar de nuestros bolsillos. 14€ diarios que van a parar a bolsillos privados, 14€ diarios que tengo que pagar a Abertis si quiero ir a salvar vidas.
Paga y calla, este es el lema de un capitalismo neoliberal feroz y voraz donde el dinero parece importar más que nuestras vidas. 14€ diarios por un peaje de una autopista más que pagada. Un precio que claramente sigue unos intereses económicos que tienen como objetivo enriquecer a unos pocos a base de sobreexplotar a la clase trabajadora. Una clase ya de por sí saturadísima, y más estos días. 30 días x 14€ diarios... solo hay que echar cuentas.
Un dinero que si ya de por sí es abusivo, estos días se ha visto incrementado dado el incremento de trabajo: jornadas exhaustivas, modificaciones de horarios, cambios de turnos... que tanto yo como muchos otros compañeros y compañeras de profesión tenemos que hacer frente. De trabajar fines de semana a hacerlo a diario, con el impacto económico que esto conlleva. Desde Vilanova i la Geltrú, pero también desde Cunit, Segur de Calafell... poco importa, son muchos los compañeros de profesión conocidos o desconocidos a los que se nos está tratando como una máquina de hacer dinero en una situación tan delicada como esta.
Es por este motivo que ahora más que nunca hay que exigir la gratuidad de este peaje abusivo, ir a trabajar no es nunca ningún privilegio. Al contrario, gracias a nuestro esfuerzo conseguiremos reducir el impacto de la pandemia. Pero para conseguirlo hay que cuidarnos unos a otros y no ponernos más obstáculos. Exigimos lo que es nuestro: facilitad nuestros trayectos diarios hacia nuestro lugar de trabajo. ¡Queremos salvar vidas, no endeudarnos a favor de empresas privadas que tienen el visto bueno de la Generalitat!
Gracias por vuestra comprensión, ¡entre todos y todas lo conseguiremos!
Marta Gàlvez, Vilanova i la Geltrú
Trabajadora del Hospital Clínic de Barcelona