La acción inspectora y de control del cumplimiento de la normativa en los ámbitos del urbanismo, actividades o la vivienda ha incoado 341 expedientes durante el año 2022. Estos controles han derivado, en algunos casos, con la interposición de sanciones y con la obligación de la restitución al estado anterior. Las actuaciones de la inspección no siempre tienen una finalidad punitiva. Este es el caso de los trabajos para localizar y determinar el parque de viviendas vacías de la ciudad para tratar de conseguir que se incorporen al mercado de alquiler. En 2022 se hicieron un total de 70 inspecciones con este objetivo.
La inspección de disciplina urbanística ha abierto en 2022 un total de 73 expedientes por obras realizadas en el término municipal sin la correspondiente licencia. Esta es una cifra ligeramente superior a los anteriores ejercicios. De este conjunto de 73 expedientes iniciados, 7 han derivado en un expediente sancionador.
La supervisión en materia de inspecciones está también presente en otros ámbitos como las actividades económicas o la vivienda. Durante el 2022 se han abierto 172 expedientes disciplinarios por actividades, 89 expedientes más sobre vivienda y 70 inspecciones para detectar si se trata de viviendas vacías.
La disciplina urbanística municipal vela por el despliegue adecuado de las ejecuciones urbanísticas. También establece los mecanismos para corregir, restituir o restaurar estas actuaciones en el caso de que incumplan la norma. La actividad de control se puede desplegar antes, durante o después de las intervenciones y obras. El control previo lo establecen la solicitud y aprobación de las licencias de obras, las comunicaciones previas y las declaraciones responsables. La inspección municipal es la que interviene durante la ejecución de las obras o con posterioridad a la finalización.
Cuando fruto de la inspección se detecta alguna infracción de la normativa y ordenamiento vigente se puede requerir la legalización siempre que esta actuación pueda ser o hacerse compatible con la norma. En caso contrario se pueden pedir la aplicación de medidas cautelares, como la suspensión de las obras, el precintado de las mismas y, en los casos más graves, incluso a pedir la demolición de la actuación realizada para revertir la situación.
Los incumplimientos más frecuentes son la realización de obras sin licencia o comunicación previa y el establecimiento de actividades o usos del suelo que no se ajustan a la calificación urbanística establecida en el planeamiento vigente en la ciudad, etc.
Ligero incremento de las licencias de actividad
En relación con las licencias de actividad económica durante el último ejercicio se han abierto 360 expedientes, tres menos que en 2021 que la cantidad de licencias de actividad pedidas fue de 363. En 2020 este número fue de 317.
Estos expedientes se inician en el momento de empezar cualquier actividad, bien sean comunicación de inicio de actividad o bien sea por licencias municipales de actividades recreativas y restauración o licencia ambiental. En los dos últimos casos se pueden tener que cumplir determinados requisitos que condicionan el otorgamiento de la licencia y el inicio de la actividad. Entre los requisitos podemos encontrar la insonorización, el cumplimiento de determinadas condiciones higiénicas y de salubridad, o medidas de protección y prevención de incendios, entre otros.
Durante el ejercicio del 2022 se han abierto 172 expedientes disciplinarios multiplicando por dos el número de actuaciones abiertas en 2020.
Las inspecciones de vivienda
En cuanto al control y observancia en materia de vivienda, durante el 2022 se ha incoado un total de 89 expedientes. Han sido 53 expedientes menos que los abiertos durante el 2021, un total de 142 mientras que en 2020 se abrieron 35 expedientes.
La disciplina de vivienda y edificatoria vela por el cumplimiento del deber legal de conservación y rehabilitación de los edificios y viviendas. Una de las causas más comunes para la apertura de un expediente es la falta de la Inspección Técnica de Edificios (ITE). La aparición de deficiencias a consecuencia de estas inspecciones o los desprendimientos de objetos en las fachadas forman parte de las causas más habituales a la hora de iniciar un expediente. También se observa y se vigila que no se hagan usos anómalos de las viviendas como el infrahabitatge, la sobreocupación y las viviendas vacías.
Otra de las actuaciones en materia de disciplina de vivienda y edificatoria que se ha desarrollado en los últimos ejercicios de forma específica es la detección de viviendas vacías durante períodos superiores a los dos años. En 2022 se han hecho en Vilanova un total de 70 inspecciones mientras que en 2021 se hicieron un total de 109.