La tecnología 5G es la quinta generación después de 2G, 2,5G, 3G, 3,5G y 4G. Ya hemos dejado atrás los primeros teléfonos móviles con los que solo podíamos hablar o recibir SMS. La implantación de la red móvil de quinta generación se presenta como la manera de multiplicar las autopistas de la información, de permitir descargar de forma mucho más rápida audios, películas, etc.
Los que se dedican a ello dicen que con su implantación se prevé aumentar exponencialmente el número de dispositivos conectados, bien sean objetos cotidianos (lavadora, nevera, robot aspiradora, etc.), como elementos del mobiliario urbano, vehículos a motor, robots industriales... o conectar cualquier dispositivo electrónico sin intervención humana, en tiempo real; a una escala nunca vista. Pero el 5G tiene una cara oscura que la ciudadanía también debe conocer. Para su despliegue, es necesario instalar pequeñas antenas (con receptor y emisor) cada 100-500 metros en ciudades y pueblos. Cada 250-500 metros en las carreteras. La Ley General de Telecomunicaciones 9/2014 del 9 de mayo establece en el artículo 29 que las compañías de telecomunicaciones tienen el derecho a la expropiación forzosa y a la ocupación de la propiedad privada para las instalaciones de su red de telecomunicaciones, lo que significa que podrán expropiar terrazas y tejados de particulares. También se colocarán (ya se está haciendo) 12.000 satélites (algunas fuentes apuntan a 20.000) en órbitas bajas de la atmósfera para irradiar todo el planeta, hasta el extremo de que la Sociedad Astronómica Francesa declara imposible la observación de los astros. En cuanto a los nuevos teléfonos móviles, dispondrán en su interior de decenas de antenas del tipo multifaz, por lo que es fácil entender que la contaminación electromagnética producida por las emisiones de radiofrecuencias se multiplicará por todo el espacio, incluyendo el interior de nuestros hogares. Su instalación y puesta en marcha supone un negocio multimillonario de gran impacto en la economía mundial, mercado del que, en nuestro caso, son directamente beneficiarios los grupos españoles de telecomunicaciones: Movistar, Orange, Vodafone... Estas empresas encuentran en las grandes corporaciones de los medios de comunicación, donde el periodismo independiente es inexistente, a los colaboradores ideales para transmitir a la sociedad una imagen solo de "bondades" y "beneficios". Estos grupos empresariales no podrían aspirar a un negocio tan productivo si no contaran también con el aval de universidades públicas que, ahogadas por la falta de subvenciones, entran en el juego de ceder investigadores formados con dinero público para trabajar en líneas de investigación de interés exclusivamente privado, no respondiendo así a las necesidades reales de la sociedad. Todo esto no podría prosperar sin el auspicio y el visto bueno de los gobernantes, que son quienes acaban oficializando los grandes acuerdos que se establecen entre todos. La ciudadanía debe saber que el llamado *Plan Nacional 5G*, que forma parte de la agenda del *Gobierno de España*, a pesar de estar a las puertas de ponerse en marcha para experimentar un despliegue territorial importantísimo, no ha presentado estudio de impacto sobre la salud y el medio ambiente, tal como prevé la *Ley General de Salud Pública*, situación que ha sido denunciada por el *Defensor del Pueblo Español* y por asociaciones ciudadanas como Ecologistas en Acción y la *PECCEM (Plataforma Española Contra la Contaminación Electromagnética)*. La gravedad y la importancia de detener el 5G se demuestra ante la movilización de científicos y médicos de 35 países, a los que se acaban de añadir 345 médicos y 900 sanitarios belgas. Estos profesionales recomiendan una moratoria para el despliegue de la quinta generación de telecomunicaciones hasta que los peligros potenciales para la salud humana y el medio ambiente hayan sido descartados por científicos independientes de la industria y el resto de actores implicados. Estos científicos manifiestan que la seguridad en la exposición al 4G nunca se ha demostrado, todo lo contrario, se han ido acumulando evidencias de su nocividad, por lo que es fácil prever que con el 5G aumentarán notablemente los riesgos sanitarios y ambientales, pues se incrementará la exposición a los campos electromagnéticos (CEM) de radiofrecuencia (RF) respecto de la 2G, 3G, 4G, WIFI ya existentes. La mayoría de médicos especialistas en medicina ambiental y epidemiólogos coinciden en que el 90% de las enfermedades y trastornos de la salud que padecemos actualmente tienen causas medioambientales asociadas a estilos de vida poco saludables y por exposición a factores de riesgo exógenos (medioambientales). La actual pandemia de cánceres, ictus, infartos, fibromialgias y enfermedades neurodegenerativas (Alzhéimer, Parkinson, Esclerosis Múltiple, Esclerosis Lateral Amiotrófica, etc.) tienen dos causas principales: la brutal contaminación química y electromagnética a la que estamos sometidos. También es la principal responsable de las cefaleas, fatigas crónicas, insomnios, TDAH (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad) en niños y jóvenes, depresión, disminución de la capacidad de atención, de observación y concentración, de la disminución de la capacidad de la memoria, de la bajada de los coeficientes de inteligencia, alergias, trastornos mentales y una larga lista. Cabe recordar que en el año 2011 la OMS (Organización Mundial de la Salud) catalogó la Contaminación Electromagnética como "potencialmente cancerígena" y ahora, al implantar la tecnología 5G, agravará aún más la pandemia de enfermedades que padecemos, según afirman la mayoría de los científicos independientes. Puedes ampliar esta información en los siguientes enlaces: https://www.ecoportal.net/paises/efectos-salud-redes-5g/?cn-reloaded=1 https://www.gigahertz.es/blog/?434-medicos-belgas-contra-el-5g- https://plataforma.quieroauditoriaenergetica.org/blog Hay muchos municipios que están trabajando con fuerza para implantar el 5G, pues la presión de los intereses es muy fuerte, pero los efectos nocivos que esta nueva tecnología puede conllevar está aumentando la preocupación entre la población. Ginebra, Roma, Bruselas, Venecia y 12 municipios más de Italia, el Distrito de Columbia de los EEUU, el Ayuntamiento de Glastonbury y de Frome del Reino Unido y otros más han conseguido, a través de pedirlo a sus Ayuntamientos, detener esta tecnología: https://www.ecoportal.net/paises/suiza-paraliza-5g/ https://plataforma.quieroauditoriaenergetica.org/blog/14-categoria-blog-1/482-paises-rechazan-5g https://www.upc.edu/es/sala-de-prensa/noticias/cataluna-se-convierte-en-el-primer-laboratorio-abierto-de-5g-a-escala-europea Estas semanas son decisivas, pues desde la *Plataforma Ciudadana QAE* se está presentando a todos los Ayuntamientos de más de 100.000 habitantes una petición telemática de suspensión de cualquier tecnología 5G. https://plataforma.quieroauditoriaenergetica.org/blog Nosotros no nos oponemos a las mejoras tecnológicas, pero no podemos aceptar cualquier tecnología a cualquier coste. Defendemos que los Gobiernos, dadas las problemáticas ambientales y de salud que todos estamos sufriendo, tienen la obligación de ser capaces de abandonar las tecnologías contaminantes y poner su fuerza para apoyar a las tecnologías inocuas. En este campo, la tecnología LI-FI es vista como una alternativa en el avance de esta investigación. En este enlace encontrarás un Hospital en Perpiñán que funciona perfectamente con esta tecnología. https://youtu.be/6Zyd3at3akM ¡Ahora los Ayuntamientos no tienen excusa! La *Dirección General de Telecomunicaciones y de la Secretaría de Estado para el Avance Digital* del actual *Ministerio de Economía y Empresa* admite que el *Plan Nacional 5G* no es una norma ni un documento, por lo que *el Plan Nacional 5G no es vinculante*. Es decir, un Ayuntamiento no incurre en ninguna ilegalidad si se niega a implementar la tecnología 5G en su municipio. ¡El despliegue del 5G solo depende de nosotros! ¡Por eso te pedimos tu implicación! El objetivo de esta campaña es conseguir una red de personas y asociaciones que sincronicen (hasta el 29 de mayo) todas las acciones que ya se están realizando a través de la Plataforma QAE. Ponemos a tu disposición las siguientes acciones: 1. En primer lugar, puedes *firmar* la petición presentada por la *Plataforma Ciudadana para la investigación judicial del sector eléctrico – QAE*, donde ya se han recogido 35.000 firmas: https://bit.ly/2Wdaf8H 2. A continuación, puedes entrar en el blog de esta plataforma y *suscribirte*: https://plataforma.quieroauditoriaenergetica.org/blog/14-categoria-blog-1/492-participacion-ciudadana-rechazo-tecnologia-5ge 3. Por último, te proponemos *firmar y registrar la instancia elaborada por la Plataforma Ciudadana QAE que anexamos a este comunicado*. El documento, en base a 13 razones (legales, sanitarias, éticas, democráticas, etc.), pide a los Ayuntamientos la paralización del despliegue del 5G. La instancia se puede presentar a título individual y/o en representación de colectivos (asociaciones, cooperativas, etc.). Para no dispersar, aconsejamos enviarlas todas a la Alcaldía. El trámite se puede hacer (hasta el 29 de mayo) a través de la sede electrónica o de la OAC. ¡Valen la pena todos los esfuerzos! Pues, tal como nos alertan los científicos independientes, no tenemos las garantías sanitarias ni ambientales para asegurar que podamos sobrevivir a los efectos de la contaminación electromagnética que el despliegue del 5G provocará a gran escala a las personas, al mundo vegetal, animal y al conjunto del Planeta. Plataforma Stop 5G Vilanova i la Geltrú
