El agua es un recurso escaso, sobre todo en la zona mediterránea y en un contexto de cambio climático; por eso hay que avanzar hacia una gestión integral del agua, desde su fuente original (subterránea o del Ebro, en nuestro caso) hasta su retorno al Medio Natural para iniciar de nuevo el ciclo.
En esta gestión integral hay toda una infraestructura de: captación, abastecimiento, transporte, saneamiento, reciclaje y retorno al medio natural que se debe gestionar con criterios de eficiencia y sostenibilidad, y de la que son competentes, además del Ayuntamiento, el Consorcio de Aguas de Tarragona y la Agencia Catalana del Agua.
Tal y como ha explicado hoy la concejala de Medio Ambiente, Núria Rovira, en el mandato anterior se planificó esta gestión integral con la elaboración del: Plan de Conservación del Agua, orientado a garantizar el abastecimiento y aumentar la eficiencia en el uso del agua, el programa de medidas de los Espacios Fluviales de la riera de la Bisbal y, colaborando con la ACA, en la diagnosis de la calidad ecológica de la riera de la Bisbal en toda la cuenca.
El plan de conservación del agua tiene como objetivo moderar el consumo de agua, reducir las pérdidas o el despilfarro de agua, mejorar la eficiencia en el uso y aumentar su reutilización. El Sistema Municipal de Suministro de Agua está formado por una red de 345 km y distribuye el agua a partir de 5 depósitos de cabecera, cuatro de ellos se alimentan con el agua importada del CAT y uno de agua de pozo. La mayoría de puntos de suministro son de tipo doméstico, 87%, con la presencia significativa de 1.568 de industriales, 125 de municipales potables, 85 de agrícolas y 19 de turísticos.
De estos planes y estudios se concluye que:
- el abastecimiento de agua en la comarca de las 4 masas de agua subterráneas está muy tensionado, por cantidad o calidad.
- la opción de la reutilización ahora mismo es inexistente con la depuradora de aguas residuales de Santa Oliva.
- El torrente del Lluc debe volver a ser un curso intermitente de agua, que es lo que naturalmente le corresponde, y por eso es imprescindible reutilizar el agua de la EDAR de Santa Oliva.
- reducir las pérdidas de agua, concentrando los esfuerzos en el sistema de abastecimiento en alta y en el Vendrell central, que es el más antiguo, que presentan unos índices por encima de los valores óptimos.
Y que se deben hacer frente a tres retos principales:
- la gestión combinada de los recursos hídricos, el agua procede de los acuíferos y del CAT.
- la necesaria mejora de la eficiencia en la distribución, es decir, no se necesita más captación, sino utilizar eficientemente el agua de la que ya dispone.
- un consumo racional y eficiente, hay usos proveídos con agua potable que podrían ser sustituidos por agua reciclada.
A partir de estas conclusiones, ya se está actuando para transformar el modelo de gestión del agua, como por ejemplo: licitando las obras del nuevo depósito del Nou Vendrell para garantizar el abastecimiento (500 mil euros), con el proyecto ejecutivo para sustituir la tubería en alta entre el depósito de Tomoví y el Molí del Blanquillo (1.4 millón de euros) donde se concentran las pérdidas principales de todo el sistema de abastecimiento y con la 5ª conexión, que llevará el agua del CAT (Ebro) hasta el depósito principal del agua de pozo para garantizar el abastecimiento a todo el municipio (400 mil euros).
Y en coordinación con la ACA y el Consejo Comarcal se está trabajando para convertir la actual Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) en una Estación de Aguas Regeneradas (ERA) y reciclar el agua. Igualmente, está previsto la sustitución de las tuberías en baja de la zona marítima (paseo marítimo y Av. Palfuriana).
En paralelo, el Ayuntamiento del Vendrell ha entrado a formar parte del círculo de comparación intermunicipal de DIBA para poder tener unos indicadores fijos y estandarizados y tener referencias de otros municipios, de diferentes tipologías residenciales, de diferentes sistemas de gestión (directa o indirecta) e ir tomando las decisiones que toquen. Los primeros resultados se presentarán en octubre-noviembre.
En resumen, la concejala de Medio ambiente, Núria Rovira, concluye que “debemos provocar un cambio cultural; pasar de un aprovechamiento inconsciente del agua a reciclar el agua y darle dos y tres vidas antes de que vuelva al medio natural”.