El PSC ha ganado las elecciones municipales de Vilafranca del Penedès de este domingo 28 de mayo con el 30,08% de los votos, una vez se ha escrutado el 100% de las papeletas. De este modo, Francisco Romero consigue arrebatar la primera posición a Junts, que esta vez empata en la segunda posición con ERC, cada uno con 5 concejales, después de que los de Junts perdieran al que ha sido alcalde los últimos 4 años, Pere Regull, que renunció a repetir mandato, y presentaran en su lugar a Aureli Ruiz. La CUP con 2 concejales y Vilafranca En Comú Podem con 1 cierran el arco consistorial, y dejan fuera a Ciutadans, que pierde el concejal que consiguió en 2019.
En las elecciones de 2019, el Junts de Pere Regull consiguió revalidar la alcaldía imponiéndose con 5.339 votos, el 29,22% del total, que le dio 7 concejales. Por detrás, ERC obtuvo 5, con 3.999 votos (21,89%). El PSC empató con los republicanos también con 5 concejales (3.625 votos, 19,84%). La cuarta fuerza en el consistorio fue la CUP (2 concejales con 2.154 votos, 11,79%), seguida de VeC-En Comú Guanyem (1 concejal con 1.391 votos, 7,61%) y de Ciutadans (1 concejal con 1.040 votos, el 5,69%).
El 28-M llegaba a Vilafranca del Penedès marcado por la renuncia de Regull. Después de 14 años en la alcaldía y de haber liderado la lista de Junts per Vilafranca en 2019, abandonaba la política local en medio de la sacudida vivida por la post Convergència.
Esta vez Junts se presentaba con el veterano Aureli Ruiz y la aspiración de recuperar el octavo concejal. A pesar de gobernar con el PSC desde hace diez años, nacionalistas y socialistas evitaban dar por hecha la continuidad de este pacto. Los dos abrían la opción de negociar con ERC, un escenario que con los resultados que ha habido queda más abierto que nunca.
La participación ha sido del 54,88%, 11,35 puntos menos que en 2019.
