El Ayuntamiento de Sitges apuesta por la tecnología aérea para conocer la ocupación de las playas y la afluencia de personas en diferentes tramos horarios. Diferentes drones tomarán imágenes del estado de las playas, sobrevolando los 18,4 kilómetros de costa del litoral sitgetano, a unos 30 metros de altura y a 50 metros de la orilla, en una prueba piloto que debe permitir una mejor gestión de las playas. El concejal de Playas, Guillem Escolà, ha explicado que "tal como se ha hecho en otros ámbitos turísticos, hacemos uso de la tecnología para obtener cifras reales sobre la ocupación en el territorio.
A partir de los datos tendremos una mejor capacidad para tomar decisiones acertadas y para definir tanto los puntos fuertes como las deficiencias en las que hay que trabajar para mejorar el entorno y los servicios que se ofrecen". El servicio sirve también para tomar medidas antiCOVID en las playas: "El control de aforo mediante drones nos servirá también, de forma coordinada con los informadores en las playas, para distribuir a las personas usuarias a otras que tengan una ocupación inferior".
Dos pilotos profesionales realizarán cuatro vuelos diarios, de media hora de duración, durante 19 días, del 15 de julio al 22 de agosto. Los drones obtendrán imágenes en tiempo real cada 10 minutos que, posteriormente se analizarán con un programa que calcula la ocupación con punteado de cabezas. De esta forma se garantiza la preservación de la identidad y los rostros de las personas que se encuentren en la playa en ese momento.
El servicio diferencia dos zonas de vuelo: la que comprende las playas que van de las Anquines a Aiguadolç, y la zona de vuelo que dará cobertura a las playas de Garraf, Cala Ginesta y Les Botigues de Sitges. Habrá diferentes zonas de aterrizaje y el servicio funcionará exclusivamente los días en que la meteorología sea favorable.
El servicio dispone de todas las autorizaciones y permisos necesarios para volar drones en el espacio aéreo sitgetano.