Ayer jueves por la noche se llevó a cabo en Vilafranca una operación policial planificada conjunta entre los cuerpos de Policía Local, Mossos d’Esquadra, Cuerpo Nacional de Policía y Guardia Civil, en una zona en torno a la calle Sant Sadurní d’Anoia. Esta zona acumula habitualmente una alta concentración de hechos delictivos, peleas e incivismo y el objetivo era detectar y denunciar irregularidades de diversa índole que sea localizada, identificar personas e inspeccionar establecimientos para detectar fraudes e infracciones a la ley de extranjería, delitos fiscales, requerimientos judiciales, entre otros.
Como resultado de este operativo, se inspeccionaron dos locales, se cursaron dos denuncias por tenencia de estupefacientes y dos denuncias por llevar navajas u objetos punzantes y una persona fue detenida por delito contra la salud pública. Además, esta persona será traspasada posteriormente al Cuerpo Nacional de Policía al encontrarse en el país de forma irregular. Dos personas más fueron denunciadas según la Ordenanza de Civismo por pelearse en la vía pública.
Esta operación parte de la iniciativa y de la coordinación de la concejalía de Seguridad Ciudadana, liderada por el concejal Ramon Zaballa. Se corresponde a la primera de un conjunto de acciones policiales que se realizarán en otras zonas de Vilafranca, en los próximos meses, con el objetivo de combatir y reducir el índice delincuencial. El alcalde FranCisco Romero reafirma el compromiso del equipo de gobierno municipal con la "seguridad, una de las preocupaciones más importantes de la ciudadanía en la actualidad y que se convertirá en uno de los ejes principales de la acción de gobierno este mandato".
