El Ayuntamiento de Calafell y el departamento de Interior de la Generalitat han firmado un convenio para aplicar en el municipio medidas alternativas a personas menores de edad denunciadas por consumo o tenencia de drogas. Esta iniciativa va destinada a jóvenes del municipio, de 14 a 17 años, que han sido denunciados justamente por estas causas, y es también una vía para detectar situaciones de riesgo y derivarlas hacia los servicios sociosanitarios o comunitarios.
La propuesta es dar a los jóvenes denunciados, o a sus familias, la opción de realizar una medida socioeducativa alternativa a las sanciones administrativas previstas para menores de 18 años. Sanciones que pueden ir de 601 euros a 30.000 euros, según la gravedad del hecho. En estos casos, se hace una intervención global a cargo de diferentes agentes: Policía local, Mossos d'Esquadra, servicios municipales de juventud, justicia, centros sanitarios...
Esta tarea tiene dos vertientes. Por un lado, y en primer lugar, que sea un beneficio para el mismo joven, incidiendo en él con medidas positivas para él e implicando a su entorno familiar y personal en el proceso educativo. Y, por otro lado, que sea un beneficio de toda la comunidad en la medida en que puede comportar una disminución de los riesgos que estas conductas causan para la seguridad ciudadana.
La acción socioeducativa consiste en un máximo de seis sesiones individuales, con la familia si se cree necesario, en las que se trabajarán los riesgos del consumo de drogas y las pautas para potenciar un estilo de vida saludable.
El proyecto establece un protocolo que va desde la denuncia, información y aceptación de la medida, sesiones socioeducativas, hasta el informe de cierre y resolución del proceso sancionador.