El Servicio de Costas del Estado financiará al 100% el proyecto para la regeneración natural de las playas de Calafell. Costas destinará 308.049,75 euros, de su presupuesto para la lucha contra el cambio climático, y su intención es llevar adelante la actuación, que se realizará entre el Estany y el límite con Cunit, antes de que acabe este año.
Esta iniciativa servirá para retener arena y compensar los efectos de los temporales, pero también enriquecerá la diversidad biológica, en flora y fauna, de la franja litoral. Consiste en favorecer la aparición de pequeñas dunas, donde se acumule arena de forma natural. De hecho, como ya pasaba antes, con los antiguos madereros.
En los últimos tiempos, el Ayuntamiento ha realizado sendas pruebas piloto en dos lugares de las playas. Se han ensayado dos sistemas para ver cuál retenía más arena: la plantación de especies vegetales típicas de las playas y acumular restos de vegetación marina. También se ha dejado una zona sin hacer nada para poder evaluar el efecto de las otras dos. Los restos de vegetación marina han resultado ser los más eficaces y en esta fórmula se basará el proyecto final.
La renaturalización es un sistema que garantiza resultados a largo plazo. Y con un coste económico muy inferior a las aportaciones de arena, que, además, tienen efectos efímeros. Ya se ha probado, con éxito, en playas de otros municipios cercanos al nuestro.
El alcalde de Calafell, Ramon Ferré, dice que "el sistema de dunas debe servir para proteger la playa de los temporales, como ya hacían los madereros, y para convertirse en un reservorio de arena que permita reponerla en los puntos que puedan quedar afectados por los temporales". Ferré señala también que "la naturalización no se acostumbra a hacer en playas tan urbanas y, por eso, este proyecto será un campo de aprendizaje para los ambientólogos".