El Ayuntamiento de Calafell abrirá en los próximos días una franja de seguridad contra los incendios forestales en la urbanización Bellamar. Esta actuación se realizará en una superficie de aproximadamente 6.600 metros cuadrados, en el límite norte y noreste del barrio, en las estribaciones inferiores de la montaña del Común, y en la franja oeste de la calle Girona, ya en la contigua urbanización de Bellamel.
Donde se abrirá la franja hay actualmente una sección de bosque muy denso y tupido, en el mismo umbral de las casas situadas al norte de Bellamar. Es una situación de alto riesgo en caso de incendio. Es más, la zona tiene unas características (tanto naturales y ambientales como por estar rodeada de núcleos habitados) que la hacen sensible a los incendios, como quedó demostrado con lo que ocurrió el verano pasado, que fue provocado.
Los trabajos durarán aproximadamente un mes, darán trabajo a cinco personas en riesgo de exclusión social y los realizará la Fundación Santa Teresa.
La franja de seguridad, tal y como marca la normativa, tendrá 25 metros de ancho. Se hará una desbrozada de la superficie y se eliminarán ramas bajas. Se conservarán las especies autóctonas de mayor interés, como el palmito.
La función de las franjas es evitar la propagación del fuego y que éste llegue a las urbanizaciones y núcleos rodeados de bosque. También facilitan el acceso de los servicios contraincendios.
La franja de protección contra los incendios de Bellamar es la segunda que se abre este año. En la urbanización Calafell Parc se abre otra. En este caso, se abrirá en el sector este del barrio, en paralelo a la calle Montpaó, en la parte trasera de las viviendas de esta vía, que da a la zona de bosque. La superficie que se rozará y limpiará tiene unos 700 metros de longitud y ocupa una superficie de 17.125 metros cuadrados.