El Ayuntamiento de Calafell exige, por unanimidad, que en las escuelas e institutos haya sanitarios que puedan atender las necesidades de los niños con diabetes y otros problemas de salud. Un servicio que atienda tareas que no pueden encargarse al profesorado, por no tener formación sanitaria, y que debería cubrir tanto el día a día de los centros como las salidas escolares.
La moción, que recoge una demanda de colectivos de familias afectadas, explica las dificultades que sufren. Unas dificultades que se agravan durante las excursiones o las colonias. A menudo, un adulto de la familia tiene que acompañar al niño, dejando el trabajo y pagándose la excursión.
La complejidad de atender estas necesidades hace que algunos centros no sean proclives a que niños con diabetes de tipo 1 y otras patologías puedan participar en actividades. Esto, según afirma la moción aprobada, es un agravio y una discriminación.
La demanda, que se trasladará a los departamentos de Educación y de Salud de la Generalitat, incluirá una segunda moción aprobada, también por unanimidad, en el pleno de este 15 de diciembre. Este acuerdo reclama más personal y medios económicos y materiales para la atención al alumnado con necesidades educativas especiales.
El acuerdo constata que la dotación de personas cuidadoras se ha reducido dramáticamente en los últimos tres cursos. Ha bajado tanto el número de personas cuidadoras, como las horas semanales de servicio. Una de las escuelas se ha quedado sin persona cuidadora.
Con estos recortes, dice la moción, es imposible hacer frente a la atención a la diversidad. Añade el acuerdo que la inclusión en la escuela no será posible si esta cuestión no se convierte en prioridad y se destinan los esfuerzos y recursos necesarios.