Hace unos meses el Grupo Novell hizo cesión de un palet de sacos de fibra de yute al grupo de Entornos del Ayuntamiento de Vilafranca, que se han puesto como protectores de los alcorques de diferentes árboles plantados en el camino de Mas Rabassa, en el marco del proyecto "Caminos con árboles" (https://mediambient.vilafranca.cat/entorn/camins-amb-arbres). Ésta es una prueba piloto de reutilización de un residuo como recurso, que es el principal objetivo del programa #PenedèsCircular, que invita a las empresas del Penedès a iniciar un proceso de transformación hacia la economía circular y la simbiosis industrial como estrategia para la competitividad y la reactivación económica (penedescircular.vilafranca.cat).
Parte del café que llega a las instalaciones del Grupo Novell de Vilafranca, lo hace en sacos de fibra de yute, un material orgánico con muchas propiedades. Por este motivo, estos sacos pueden pasar fácilmente de ser un residuo a un ser recurso y ésta es la idea clave de la Economía Circular.
El yute (Corchorus capsularis) es una planta herbácea de secano que se cultiva en Asia; necesita pocos fertilizantes y, en las rotaciones, enriquece la fertilidad del suelo. El cultivo del yute tiene un rendimiento de unas 2t de yute seco por hectárea, y cada hectárea cultivada consume cerca de 15t de CO2 y libera 11t de oxígeno. La fibra de yute es biodegradable y tiene propiedades como una baja conductividad térmica (que lo hace ser buen aislante) y una moderada retención de la humedad. Así pues, los sacos hacen una función de acolchado o mulching y regulan la temperatura del suelo (aislando del frío del invierno y del calor del verano), retienen la humedad, reduciendo el número de riegos necesarios, previenen el crecimiento de malas hierbas que compiten con las raíces por el agua y los nutrientes, tienen una función de protección mecánica de los trabajos de poda y siega hechos alrededor de los árboles y previenen la erosión del suelo actuando de capa protectora. Al ser de un tejido orgánico y biodegradable, con el tiempo se degradan, pasando a ser parte estructurante del suelo. Por este motivo, la fibra de yute ya se ha aplicado en el campo de la bioingeniería y restauración del paisaje, como geotextil para evitar la erosión del suelo, o en los contenedores de árboles.
Los sacos de café hechos con este material, pues, son envases respetuosos con el medio ambiente desde una perspectiva del ciclo de vida del producto. Con este proyecto, se les da un nuevo uso y acaban integrados en el suelo sin generar ningún tipo de residuo.
Compromiso con la sostenibilidad
Desde hace años, desde el Grupo Novell se ha hecho una clara apuesta por la sostenibilidad, desde el origen, con cafés orgánicos y ecológicos, hasta el consumo, con las cápsulas compostables y toda la gama de productos Residuo 0. Y desde 2021, se ha sumado a la iniciativa #Penedès Circular. La economía circular es un modelo económico de producción y consumo donde los materiales, productos y servicios son diseñados para durar y volver a entrar en la cadena de valor industrial de forma que se mantiene la utilidad y el valor de los productos y los componentes a lo largo del tiempo, eliminando tóxicos y optimizando el uso de otros recursos como la energía y el agua.
El concejal de Promoción Económica y Comercio, Joan Manel Montfort, ha alabado el compromiso con la sostenibilidad y la economía circular del Grupo Novell y ha animado a otras empresas a "adherirse a la economía circular y encarar este proceso de transformación ofreciendo herramientas para optimizar y aprovechar los recursos o bien obtenerlos y aportándoles nuevo valor".
Esta acción se enmarca en la certificación Biosphere que ostenta Vilafranca del Penedès y con la cual acredita que tiene entre sus objetivos la sostenibilidad y que trabaja para una mejora continua.