Con un presupuesto de casi 7 millones de euros a ejecutar hasta 2025, la Empresa Municipal de Aguas de Vilafranca (EMAVSA) ha iniciado el Proyecto Integral de Digitalización del Servicio Municipal de Agua y Saneamiento, un proyecto de mejora en la gestión del ciclo integral del agua para la eficiencia y racionalización de los recursos hídricos, actuaciones que cobran especial importancia en el contexto de sequía actual.
El proyecto se ha presentado a los Fondos Europeos Next Generation como Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica – PERTE para cubrir con una ayuda de 4,6 millones parte de la financiación.
El teniente de alcalde y presidente de la Empresa de Aguas, Aureli Ruiz, y el gerente de EMAVSA, Xavier Mas, han anunciado este miércoles en rueda de prensa los principales objetivos estratégicos del proyecto, que principalmente incidirán en la mejora de la eficiencia de la red.
“En Vilafranca tenemos un nivel de eficiencia alto, del 82% actualmente, pero aún tenemos recorrido para evitar pérdidas de agua y mejorar su rendimiento”, comentaba Aureli Ruiz. Según han explicado, el proyecto prevé una inversión de 4,6 MEUR para la implantación de los diferentes dispositivos de medición y control del agua, mientras que el resto de la actuación tiene que ver con la implementación de un sistema interno que permita el control y gestión de las redes y sus usuarios.
Xavier Mas indicaba que este proyecto de digitalización “configura una base de datos común, a partir de la cual todos los programas de gestión se integren. Esto revertirá en una mejora del control y calidad del agua, la implantación de los telecontadores y el telecontrol, que permitirán detectar antes las incidencias para actuar más rápidamente”.
En la línea de actuaciones de eficiencia y racionalización de los recursos hídricos, la expectativa es dar un salto hacia la medición y el control inteligente del agua, que permita aprovechar mejor los recursos existentes, explotar recursos sostenibles cercanos, medir y controlar el flujo del agua. El objetivo es conseguir una vez finalizada su implantación, un rendimiento de eficiencia del 90%.
En cuanto a la gestión, el proyecto busca una administración de recursos abierta y moderna, para conseguir gestiones más ágiles y seguras para los usuarios, fomentando el uso responsable del agua y asegurando el servicio básico de suministro a todos los colectivos.
