El Ayuntamiento de Mollerussa ha encargado un estudio de movilidad con el objetivo de tener una valoración objetiva sobre el impacto en la red viaria de las diferentes actuaciones previstas en la zona del Plan de Barrios donde se actuará en el marco del Plan de Inversiones 2017-2018. El hecho de que en la zona centro del núcleo urbano esté prevista la supresión de plazas de aparcamiento así como también la prioridad para el peatón en las calles adyacentes implicará diferentes restricciones del paso de vehículos así como la posibilidad de que haya cambios de sentido de circulación, según ha explicado el alcalde Marc Solsona. El estudio se realiza con sistemas de control de paso de vehículos en diferentes puntos de la ciudad y la previsión es que esté terminado durante el verano.
El estudio fue encargado por Junta de Gobierno el pasado 17 de mayo a la empresa especializada Mcrit SL por un importe total con IVA de 21.538 euros. En cuanto al Plan de Inversión, en concreto, el Ayuntamiento tiene previsto actuar durante el 2017 en las calles de la Ciudad de Lleida, del Once de Septiembre, de Santa Cristina y de la Estrella, por un lado, y por otro, en la avenida de Cataluña, en la calle Academia y en la calle Ponent. Asimismo, para el 2010 se prevé que la actuación se concentre en el ámbito de las plazas del Ayuntamiento, de Manuel Bertrand, Mayor y del Pla d'Urgell así como también en la zona de la Vilaclosa. Tercera prueba piloto sobre movilidad dentro del proyecto SmartLab Por otro lado, Mollerussa inicia esta semana la tercera prueba piloto dentro del proyecto SmartLab impulsado por la Generalitat y al que está adherida desde finales del año pasado con el fin de probar soluciones tecnológicas que puedan solucionar retos municipales. En este caso se trata de una solución en el campo de la movilidad, después de las dos anteriores que ya ha llevado a cabo, siendo la primera un estudio acústico y la segunda la utilización de una aplicación informática en el marco de la organización de congresos y jornadas. Este tercer proyecto, bautizado como Street Flow por la empresa Tecsidel que lo probará en la capital de Pla d'Urgell, consiste en un sistema lector de matrículas instalado en un único pórtico que permite analizar la composición vehículo a vehículo del tráfico que lo atraviesa con el objetivo de clasificarlo y medirlo en detalle. Por ello, técnicos de la empresa tienen previsto instalarlo en la calle Ferrer i Busquets (antigua N-II) aprovechando el pórtico de señalización vertical delante del semáforo que hay a la altura de La Salle. La instalación se hará de madrugada ya que es necesario cortar uno de los carriles de la vía para que los operarios puedan trabajar. El sistema se mantendrá un mínimo de seis meses en prueba ya que el objetivo de la empresa es probarlo también teniendo en cuenta diferentes temperaturas ambientales y condiciones climatológicas, como puede ser la niebla. El aparato, que estará señalizado en su ubicación, podrá contabilizar los tipos de vehículo que atraviesa esta vía ya sean camiones o turismos, por ejemplo.