El Ayuntamiento de Tàrrega ha comenzado estos días en las obras de renovación de la antigua Casa de Cultura, situada en la calle de Les Piques, con el objetivo de transformar este edificio histórico en un nuevo espacio funcional para las áreas de Cultura y Promoción Económica. La actuación, con un presupuesto de 99.527 euros (IVA incluido), se prevé que tenga una duración de cuatro meses y se espera que el personal se traslade a la nueva ubicación durante el primer trimestre de 2025.
El proyecto incluye una serie de intervenciones de mejora que permitirán adecuar el edificio tanto en términos de seguridad como de eficiencia energética, contribuyendo a un uso más sostenible del espacio. Además, se conservarán elementos arquitectónicos originales de 1748, reforzando el compromiso de Tàrrega con la preservación del patrimonio cultural.
Las obras de adecuación incluyen varias intervenciones para garantizar la funcionalidad y el confort de los futuros usuarios. Entre los trabajos principales, se encuentran:
- Sustitución de ventanas y balconeras por unas de madera que mejoren el aislamiento térmico y acústico.
- Instalación de dos bombas de calor para la climatización, promoviendo una mayor eficiencia energética.
- Renovación de la red eléctrica, adaptándola a las necesidades actuales.
- Actualización de los lavabos y mejora de la terraza, haciendo el espacio más accesible y funcional.
Estos trabajos de adecuación interior aseguran que la Casa de Cultura pueda ofrecer un entorno adecuado para servicios administrativos y oficinas, además de preservar la estructura y el valor patrimonial del edificio. Además, la potenciación de los usos del edificio también servirá para dinamizar este sector del casco antiguo.
Recuperación de un espacio emblemático
El edificio, que en los últimos años se había utilizado principalmente como espacio de almacenamiento y para exposiciones en la Sala Marsà, volverá a ser un punto de referencia para la comunidad de Tàrrega. La Casa de Cultura tiene una superficie de 743 m² y dispone de dos entradas: una por la calle de la Vilanova, donde se encuentra la Sala Marsà, y otra por la calle de Les Piques. La terraza, que conecta con una edificación adyacente, también recibirá mejoras, garantizando su integración como espacio funcional.
Este proyecto también permitirá reunir al personal técnico de las concejalías de Cultura y Promoción Económica en un mismo espacio, facilitando una gestión más eficiente e integrando servicios esenciales en un edificio histórico. La reubicación de los técnicos de Cultura supone, además, un retorno al espacio que antiguamente ya ocupaban, antes de su traslado a la plaza de Sant Antoni hace unos veinte años.
Con esta intervención, el Ayuntamiento de Tàrrega refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la preservación del patrimonio, asegurando que la Casa de Cultura siga siendo un espacio relevante para la comunidad local.