El Ayuntamiento de Tàrrega prevé aplicar el criterio de progresividad fiscal en lo que se refiere al IBI correspondiente a determinados inmuebles urbanos de usos no residenciales a partir del año que viene. Atendiendo a la Ley de Haciendas Locales, se aplicará una nueva cuota de IBI diferenciada del tipo máximo (1,23%) aplicable al 10% del padrón fiscal de los inmuebles comerciales e industriales con mayor valor catastral. La misma medida también se hará efectiva al 5% del padrón fiscal de los solares urbanos con mayor valor catastral. Esto supondrá un aumento de 68.706 euros en lo que se refiere a ingresos en concepto de IBI, cantidad que dará oxígeno a las finanzas municipales y permitirá abordar medidas para hacer frente a la crisis causada por la Covid-19.
El concejal de Finanzas y Transparencia, Daniel Esqué, destaca que "Tàrrega sigue avanzando así hacia una fiscalidad más justa y progresiva en la que los tributos no son lineales sino que paga más quien más tiene y menos quien menos tiene". La medida será una de las modificaciones de las ordenanzas fiscales que la capital de Urgell llevará a votación del Pleno el próximo jueves 22 de octubre (ayer miércoles ya se informó al Consejo Municipal de Participación Ciudadana). En cuanto al resto de bienes inmuebles de naturaleza urbana se mantiene el tipo impositivo del 1,1073% y a los bienes inmuebles de naturaleza rústica el 0,7076%.
Por otra parte, Tàrrega también prevé aplicar un nuevo recargo del 50% a la cuota del IBI de pisos vacíos en el caso de que sus titulares sean personas jurídicas y tengan en propiedad 5 o más viviendas permanentemente desocupadas. La medida afectará, por tanto, de forma mayoritaria a bancos, inmobiliarias, SAREB,... Durante el año 2021 se conformará el padrón para poder aplicar el mencionado recargo a partir del ejercicio de 2022. "Queremos así penalizar a todos aquellos grandes tenedores que mantienen las viviendas vacías cuando la oferta actual de Tàrrega no cubre ni de lejos la demanda", afirma Daniel Esqué. Por otra parte, se prevé un aumento del impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana (más conocido como plusvalía) cuando el período de generación (el tiempo que los titulares han sido propietarios de un inmueble) sea inferior a 10 años. Así, si el período de generación es de hasta 5 años, se gravará un 3,7% sobre su valor catastral en las operaciones de compraventa (actualmente es del 3%) y hasta 10 años, un 2,7% (actualmente es de 2,44%). Los períodos de generación superiores a 15 años se mantendrán en el impuesto actual del 2,44%. La voluntad es aumentar la fiscalidad para las operaciones de compraventa susceptibles de tener un ánimo especulativo.
Otra de las modificaciones de las ordenanzas fiscales afecta a la tasa de recogida de basuras, que aumentará un 30% en todas las tarifas. El incremento viene obligado por los cánones que aplica la Agencia Catalana de Residuos, los cuales aumentan exponencialmente en cada ejercicio (en 2019 era de 41€/Tn; en 2020 es de 47,10€/Tn; y en 2021 alcanzará los 53,10€/Tn). Cabe añadir también el hecho de que UrgellNet ha aumentado un 13% la cuota del servicio de recogida durante los dos últimos años. Estos incrementos, junto con la circunstancia de que la tasa no se actualiza desde el año 2016, implica que si se mantuviera congelada, las arcas municipales deberían asumir un déficit aproximado de 275.000 euros. Además, Tàrrega sólo separa correctamente un 37% de los residuos de recogida selectiva cuando los objetivos de reciclaje fijados por la normativa europea son de un 50%. En este sentido, el Ayuntamiento de Tàrrega hace un llamamiento para concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de generar menos residuos (consumo responsable) y separar mejor. "Cuanto más alto sea el porcentaje de reciclaje menos costes tendremos que asumir los contribuyentes a la vez que también beneficiaremos al medio ambiente", señala Daniel Esqué. Cabe decir que el municipio de Tàrrega aplica una de las tasas más bajas de la demarcación de Lleida en lo que se refiere a la recogida de basura en las viviendas.
En cuanto al Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica se suprimirá la bonificación del 100% que se aplica a los vehículos de más de 25 años de antigüedad, considerados como contaminantes. Se quiere favorecer así los vehículos que se ajusten a una movilidad más sostenible. En este sentido, se mantendrá la bonificación del 25% para vehículos calificados como "cero emisiones" o "ECO" según el registro de la Dirección General de Tráfico así como para vehículos eléctricos o híbridos con emisiones de hasta 120 gr/km de CO2.