Se estiman buenas cifras en el sector turístico en la demarcación de Lleida

El primer fin de semana de verano, que coincide con las fiestas de San Juan, tendrá una ocupación turística alta, que se situará en una media del 80% y oscilará entre el 70% y la plena ocupación en función de las diferentes modalidades de alojamiento y de las zonas turísticas de la demarcación de Lleida. La mejor ocupación se producirá en las zonas del Pirineo con la celebración de la fiesta del fuego del solsticio de verano con la bajada de fallas y la quema de los haros en diferentes municipios de las comarcas de la Alta Ribagorza, el Pallars Sobirà y la Val d'Aran. En cuanto al verano, el Patronato de Turismo se muestra optimista, con una previsión de incrementar alrededor del 7% el número de pernoctaciones en los establecimientos de alojamiento situados en las zonas turísticas de las comarcas de Lleida, además de las empresas de turismo activo, lo cual también comportará un mayor número de contratación de actividades respecto al verano de 2016, siempre que las condiciones meteorológicas acompañen. El verano pasado la ocupación turística en las comarcas leridanas ya supuso un aumento de un 11% en el número de visitantes y de pernoctaciones respecto al año anterior (2015), que a su vez también experimentó un incremento de un 5% respecto al número de pernoctaciones de 2014. El Patronato prevé que si se cumplen estas previsiones, las comarcas de Lleida recibirán durante las vacaciones de verano unos 615.000 turistas, que generarán alrededor de 1.780.000 pernoctaciones entre los establecimientos de turismo reglado y no reglado, al margen de las segundas residencias, que no están cuantificadas. Del total de visitantes, unos 100.000 serán extranjeros, los cuales harán unas 300.000 pernoctaciones en las diferentes modalidades de alojamiento turístico. Con estos resultados, este verano se podría situar en términos similares a los resultados de los años 2006 y 2007, considerados como los mejores antes del período de la crisis económica, según ha explicado el director del Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida, Juli Alegre. Estas previsiones están determinadas tanto por los datos positivos de estos dos últimos años, por el aumento de la demanda que están experimentando los diferentes subsectores de alojamiento de las zonas turísticas leridanas, como por el hecho de que desde principios de año se mantiene una tendencia al alza en cuanto al número de visitantes y de pernoctaciones respecto a 2016. Según los datos del INE de enero a abril de este año, el número de pernoctaciones en los establecimientos de hotelería, turismo rural, apartamentos turísticos y campings se ha incrementado un 6 % en el conjunto de la demarcación respecto al mismo período de 2016, y el número de visitantes ha aumentado un 10,50%. En cuanto al turismo extranjero, el Patronato prevé que se mantenga en porcentajes similares a los del verano pasado, que ya tuvo un comportamiento muy favorable respecto al año anterior con un crecimiento en el número de pernoctaciones de un 17% con relación a 2015. El verano de 2016 los visitantes extranjeros representaron el 17% del total de los turistas que visitaron durante los meses estivales las comarcas de Lleida. El mes de agosto, como ya es habitual, será el que comportará una mayor demanda turística, con una media de ocupación que oscilará entre el 85% y el 90%, según el tipo de alojamiento y la zona turística, aunque en algunas fechas y destinos y de acuerdo con la tipología de alojamiento los porcentajes pueden llegar a la plena ocupación en las zonas del Pirineo y por el puente del 15 de agosto. Precisamente el hecho de que el 15 de agosto se celebre este año en martes contribuirá a mantener un nivel de ocupación alto hasta el fin de semana del 20 agosto, según el Patronato. Los meses de julio y septiembre tendrán un comportamiento muy similar, con una ocupación media que oscilará entre el 45 y el 60%, dependiendo también del tipo de alojamiento y de la zona. El Patronato de Turismo destaca el incremento de la ocupación que se ha ido produciendo en los últimos años en el mes de septiembre, que prácticamente ha llegado a igualar en porcentaje el mes de julio, considerado como uno de los meses turísticos por excelencia. Sin embargo, hay que tener presente que el factor climatológico tendrá un papel importante en cuanto al comportamiento turístico de la temporada, ya que las temperaturas altas como las registradas este junio favorecerán los destinos más frescos como la zona de los Pirineos. La ocupación por sectores Por sectores, la hotelería prevé una media de ocupación durante el mes de julio en las zonas turísticas de Lleida y su área de influencia de entre el 45 y el 50%. En agosto, esta media se situará en torno al 90 %. En cambio, en el mes de septiembre, aún muy lejos de ver el movimiento de las reservas, se prevé que oscile también entre el 45 y el 50%, favorecida por el puente de tres días que dejará la Diada del 11 de Septiembre. El turismo rural también se muestra optimista en cuanto a las previsiones para este verano. La ocupación podría oscilar en el conjunto de la demarcación de Lleida entre el 45 y el 50% en julio, entre el 80 y el 85% en agosto y entre el 40 y el 45% en septiembre. El sector del camping prevé igualmente una buena ocupación en sus diferentes modalidades de alojamiento, si bien las casi 4.000 plazas tendrán una ocupación alta y actualmente ya presentan un nivel de reservas muy alto para toda la campaña. Las previsiones en la modalidad de acampada para el mes de julio se mueven alrededor del 50 y el 55%, en agosto la primera quincena llegarán a la plena ocupación y en la segunda estarán entre el 80 y el 85%, mientras en septiembre la ocupación será de en torno al 45%. En cuanto a las plazas de bungalows, tendrán una ocupación el mes de julio, de entre el 70 y el 75%, plena ocupación durante todo agosto y finalmente, el mes de septiembre, rondarán el 60%, según el Patronato de Turismo. En cuanto a las actividades de turismo activo, las empresas también se muestran optimistas con la previsión de incrementar entre un 5 y un 8% el número de los servicios contratados la temporada anterior. Desde la Asociación de Empresas de Turismo Activo y Deportes de Aventura del Pallars Sobirà se espera, siempre que las condiciones meteorológicas acompañen, poder batir un récord en la contratación de servicios este verano y situarse en cifras por encima de los años anteriores a la crisis económica. 56.453 plazas de alojamiento reglado La oferta de alojamiento turístico reglado para este año 2017 en las comarcas de Lleida entre hoteles, campings, turismo rural, apartamentos turísticos, refugios, instalaciones juveniles y albergues se sitúa en 1.282 establecimientos y 56.453 plazas, una cifra muy similar a la de la temporada anterior. Por tipo de alojamiento, la oferta de hotelería es de 403 establecimientos con 20.556 plazas, de las cuales para el verano sólo quedarán abiertas al público alrededor de 19.000; en turismo rural, 640 casas y 4.559 plazas, y en camping, 61 establecimientos y 21.866 plazas, de las cuales 4.000 son de bungalows. El resto de la oferta engloba los 28 apartamentos turísticos (con 631 plazas), los 39 albergues (3.104), los 66 refugios (2.072), las 29 casas de colonias (2.293), las 6 granjas escuela (686) y 1.655 viviendas de uso turístico. Procedencia de los visitantes Los turistas que visitarán las comarcas de Lleida este verano provendrán en su gran mayoría de Cataluña, un 60% del total, seguidos de los visitantes del resto del Estado, que serán más del 20% (procedentes mayoritariamente de la Comunidad de Madrid, del País Valenciano, Castilla-La Mancha, el País Vasco y Murcia). Alrededor de un 17% corresponderá al turismo internacional, de manera que casi 100.000 turistas extranjeros visitarán este verano en la demarcación de Lleida. Por países de procedencia, Francia es el primer mercado emisor con un 42%, seguido del Benelux con un 11 %, Alemania con un 8% y el resto, como Gran Bretaña e Israel, con porcentajes inferiores. Por zonas, la Val d'Aran, los dos Pallars, la Alta Ribagorza, el Alt Urgell, la Cerdanya y la Noguera concentrarán las cifras de ocupación más altas. El resto de comarcas y la misma ciudad de Lleida también tendrán un buen comportamiento en la ocupación turística para este verano, según las previsiones del Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida.