El grupo municipal del Comú de Lleida ha presentado esta mañana en la Paeria una valoración sobre sus dos años en la legislatura. Se han centrado en explicar qué servicios han prestado a la ciudadanía y qué problemáticas ha intentado solucionar. El grupo asegura que su legislatura y acción son útiles, a pesar de la cantidad de propuestas que el equipo de gobierno le ha tumbado.
El presidente del Comú de Lleida, Sergi Talamonte, ha explicado cuáles han sido algunas de sus propuestas presentadas para mejorar las condiciones de la ciudad. El Comú de Lleida exige revitalizar la Huerta de Lleida, coincidiendo con otros grupos municipales, como PDeCAT. Durante su legislatura, el Comú, se ha centrado en proyectos o iniciativas que mejoren la movilidad. En este ámbito, incentivaron la mejora de rutas y la ampliación del uso del autobús –sin encarecer el precio—. Esta propuesta, sin embargo, el equipo del gobierno de la Paeria no la tuvo en cuenta. Por otro lado, han presentado ideas para impulsar el carril bici, consiguiendo un mayor resultado que con las propuestas anteriores.
En cuanto a los servicios públicos, han presentado un debate sobre la remunicipalización de los servicios públicos, como por ejemplo el agua. Esta propuesta la han presentado junto con ERC y la Crida-CUP. El objetivo de esta remunicipalización es crear una alternativa a una gestión privada que, según el Comú, "es beneficiosa para unos pocos y cara para el vecindario".
El hecho de su entrada en el Ayuntamiento ha supuesto, como ellos lo llaman, el fin del oasis de la Paeria. A través de sus propuestas, iniciativas y quejas han roto la situación de quietud del Ayuntamiento, en la que el equipo del gobierno, según Sergi Talamonte, "a veces se ha posicionado en contra de la voluntad de los ciudadanos y era necesario cambiar dinámicas".
