Un centenar de ganaderos han llevado a cabo este viernes en Lleida una acción para dar a conocer a la ciudadanía el proyecto que promueven para reabrir la planta de tratamiento de purines de Tracjusa de Juneda (Garrigues). Durante el acto han repartido bocadillos entre la gente que pasaba por la plaza Ricard Viñes, donde también se ha concentrado una veintena de miembros de la plataforma Aturem la incineradora a Juneda los cuales, con mascarillas con la cara de un cerdo, han expresado su rechazo al hecho de que la planta pueda reabrir utilizando la quema de combustible derivado de residuos (CDR) para secar los purines por el riesgo que, según aseguran, podría suponer para la salud de los vecinos del entorno. Posteriormente, los defensores del proyecto se han desplazado con más de una veintena de tractores hasta la sede del Departamento de Agricultura en Lleida donde han entregado un manifiesto para reclamar el apoyo de la consejería a la reapertura de las instalaciones de Tracjusa, paradas desde 2014 a raíz del recorte estatal a las renovables. La movilización ha finalizado con el vertido de dos botellas de purines delante del edificio.
La ciudad de Lleida ha sido el escenario este viernes de protestas tanto de partidarios como de opositores al proyecto de la nueva Tracjusa. Un centenar de ganaderos con más de una veintena de tractores con cisternas para el transporte de purines se han desplazado desde Juneda para llevar a cabo una acción en defensa de la reapertura de la planta y para poner en valor la tarea que llevan a cabo. Convocados por la asociación Gestió Agroramadera de Ponent (GAP), los favorables al proyecto se han concentrado en la plaza Ricard Viñes de la capital del Segrià donde han repartido unos 800 bocadillos con productos porcinos entre los ciudadanos que se han acercado para conocer más de cerca el proyecto que están tramitando para volver a poner en funcionamiento Tracjusa. El presidente de GAP, Eduard Cau, ha defendido el proyecto de la nueva Tracjusa como solución para dar salida al excedente de purines que se genera en la zona de las Garrigues y ha asegurado que "cumple todos los requisitos legales y es viable ambientalmente y técnicamente", ya que cuenta con el aval de un dictamen ambiental realizado por el ambientólogo Ramon Folch. Cau ha explicado que parte de los CDR que utilizará Tracjusa provendrán de Lleida, mientras que el resto de otras zonas del país. En este sentido, ha remarcado que "es una planta de purines y no una incineradora porque lo que haremos será un aprovechamiento energético de un recurso que está dentro de las prioridades de la UE, algo que se está haciendo con mucha normalidad en muchas industrias de Cataluña". Asimismo, ha reclamado el apoyo del Departamento de Agricultura al proyecto que promueve la asociación de ganaderos para dar salida al excedente de purines. "Somos un colectivo muy numeroso, somos gente del territorio, hace muchos años que trabajan y cada día intentamos hacerlo mejor y el proyecto forma parte de esta trayectoria", ha declarado. Desde GAP han explicado que la tramitación de la nueva Tracjusa sigue su curso y que antes de finales de año podría quedar aprobado, decisión que dependerá del Departamento de Territorio y Sostenibilidad. La plataforma opositora defiende otras alternativas "menos contaminantes" para tratar los purines Durante la acción de los ganaderos, se han acercado hasta la misma plaza con diferentes pancartas una veintena de miembros de la plataforma Aturem la incineradora a Juneda para hacer oír su voz contraria al proyecto ya que rechazan que Tracjusa pueda reabrir utilizando la quema de combustible derivado de residuos (CDR) para el secado de los purines -en lugar del gas natural con el que habían funcionado las instalaciones hasta 2014-, ante "el potencial riesgo" que este sistema "de incineración" podría suponer para la salud de las personas ya que comportaría la emisión de dioxinas y furanos, sustancias potencialmente cancerígenas, según ha manifestado Joan Vàzquez, secretario general de Ipcena y miembro de la plataforma. Vàzquez ha defendido la existencia de otras alternativas para la gestión de las deyecciones ganaderas como las que se están llevando a cabo en Almenar o Alcarràs, centradas en sistemas de separación de la parte sólida y líquida del purín para obtener fertilizante y otros subproductos valorizables para la agricultura. Josep Amigó, también de la plataforma, ha advertido que si finalmente se acaba autorizando la nueva Tracjusa "Lleida se convertirá en el crematorio de Cataluña" ya que "después de este proyecto de incineración vendrán muchos otros". Los Mossos d'Esquadra han mantenido ambos bandos a unos metros de distancia para evitar que los contrarios pudieran acercarse hasta los defensores de la nueva Tracjusa. Ambas movilizaciones han finalizado sin incidentes a pesar de las consignas cruzadas lanzadas por unos y otros. Los miembros de la plataforma Aturem la incineradora han sido los primeros en retirarse, mientras los ganaderos –a pie y con los tractores- se han dirigido desde Ricard Viñes hasta la sede del Departamento de Agricultura en Lleida. Una vez allí han cortado la calle con los tractores y han llevado a cabo la lectura de un manifiesto en defensa de la reapertura de Tracjusa, texto que posteriormente han entregado al director de los servicios territorial de Agricultura, Ferran de Noguera. La protesta de los ganaderos ha finalizado con el vertido de dos botellas llenas de purines en los árboles que se encuentran en el exterior de la sede de la consejería en la capital del Segrià. Después de recibir el manifiesto, Ferran de Noguera, ha recordado que en último término la concesión de la autorización de la nueva Tracjusa depende de Territorio y Sostenibilidad. Sin embargo, ha expresado que desde Agricultura "no estamos ni a favor ni en contra" del proyecto pero que la apuesta de la consejería es por "la economía circular basada en convertir el residuo en un recurso valorizable y que para obtenerlo se utilicen materias provenientes del ámbito agrario, ya sean agrícolas, ganaderas, forestales, pesqueras o bien alimentarias". Los opositores cortan la N-240 durante más de media hora para dificultar la llegada de los ganaderos en tractores a Lleida Previamente, una decena de opositores a la nueva Tracjusa han cerrado el paso a los tractores de ganaderos favorables al proyecto cuando se dirigían hacia Lleida, para participar en la acción en defensa de la reapertura de la planta de purines de Juneda. Los contrarios, miembros de la Assemblea Pagesa que han desplegado una pancarta con el lema 'Pagesia sí, porqueria, no', han detenido el tráfico durante más de media hora en la rotonda de Margalef de la N-240, en Torregrossa (Pla d'Urgell), aunque finalmente la tractorada ha podido continuar su camino hasta la capital del Segrià.