Según un libro de la UdL, un 34% de los leridanos vivía por debajo del umbral de la pobreza en 2014

03 de julio de 2017 a las 09:06h
El porcentaje de leridanos asalariados que en 2014 vivían por debajo del umbral de la pobreza era del 33,93%, más de tres puntos porcentuales respecto a 2008, según revela el libro 'La pobreza en Lleida: el impacto de la crisis sobre las rentas salariales y las pensiones' (Edicions de la UdL, colección Sud-Nord), de los profesores de la Universitat de Lleida (UdL), Joan Pere Enciso, Rafael Allepuz y Xavier Pelegrí. Este trabajo, que analiza cómo la crisis ha afectado a los ingresos de las personas asalariadas, las paradas con prestaciones, las pensionistas y las que reciben la renta mínima de inserción, a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística y de la Agencia Tributaria entre 2008 y 2014 (último sobre el cual hay datos disponibles), concluye que la sociedad leridana se ha empobrecido a un ritmo superior que la del conjunto catalán y español. La renta familiar bruta disponible por habitante se redujo en Lleida un 23,18% entre 2008 y 2012.
Entre las causas más importantes de la caída de la renta familiar, el libro menciona la reducción del número de personas ocupadas en un 10,82%, el proceso de devaluación salarial (12,48%), que entre los menores de 25 años alcanza el 40%, así como de las pensiones y de las prestaciones por desempleo. El 60% de los pensionistas, según explican los autores, recibían una pensión por debajo de la media catalana y estatal y los ingresos de las personas sin trabajo con prestaciones se redujeron un 20% entre 2010 y 2014. En cuanto a la evolución de la renta mínima de inserción -a partir de datos de la Generalitat-, los importes ejecutados aumentaron en estos seis años proporcionalmente más en la demarcación de Lleida que en el conjunto de Cataluña, pero la cuantía que recibía cada miembro destinatario disminuyó. El trabajo también pone de relieve que la crisis también ha comportado el aumento de las desigualdades. Así, en el año 2008, por cada 100 euros que recibía el 50% de la población de Lleida con menos ingresos, el 50% restante recibía 389. En 2014, ya eran 447 euros, un 14,91% más. Otros datos que aporta la publicación ponen de manifiesto que las mujeres seguían teniendo unos ingresos inferiores a los hombres, sobre todo en la franja de mayores de 65 años. Aunque la brecha salarial había disminuido en el período analizado, el diferencial seguía siendo relevante, de unos 17 puntos porcentuales. Este es el segundo libro que los mismos autores dedican al tema de la pobreza en Ponent, el anterior, 'Nueva y vieja pobreza en las comarcas de Lleida. Percepción desde los servicios sociales', también era fruto de un estudio financiado por la Oficina de Desarrollo y Cooperación de la UdL que se publicó hace dos años en la misma colección.