La semipresencialidad genera dudas en el estudiantado de las universidades

03 de julio de 2020 a las 08:38h

El modelo de universidad semipresencial que se plantea para el inicio del próximo curso genera dudas al estudiantado y también al profesorado. El hecho de asistir un día sí y otro día no a clase se podría convertir en la tónica del próximo curso y esto ha provocado angustia en alguna parte de la comunidad universitaria, ya que entienden que "no todo el mundo pasa por la misma situación".

Así pues, según ha podido saber este diario, muchos estudiantes están preocupados y tienen malestar con relación al devenir, incierto hasta el último momento, del curso 2020-2021, ya que son muchos los que argumentan que "para algunos la semipresencialidad es la peor opción porque esto supone tener los mismos gastos que los otros años en cuanto a alojamiento pero que sea útil la mitad del tiempo". En la misma línea argumentan que esto les provoca un "encarecimiento de la vida universitaria y más después de que muchos estemos pasando un tiempo complicado en tanto que o hemos perdido el puesto de trabajo o la situación de la familia se ha visto afectada económicamente hablando". En este sentido, argumentan que por mucho que no estén contentos con el modelo virtual, al menos es un mal menor.

En cuanto al estudiantado, también hay quien defiende que "cada grado es un mundo" y que muchas veces requieren esencialmente una práctica presencial por el alto contenido práctico de estos grados. Es por eso que, entendiendo que de aulas en las universidades hay las que hay y que se exige un distanciamiento social, se procurará hacer las clases con grupos numerosos de manera virtual y las de grupos pequeños lo máximo presencial posible. A la vez, se trabaja para que las clases presenciales estén todas el mismo día y no coincidan con las virtuales.

Por otro lado, la demanda del Consejo del Estudiantado es que, sobre todo, en el caso de las clases virtuales no se intercambie por material que haga que el aprendizaje sea autodidacta y no haya explicaciones, ya que entendiendo que "en condiciones normales" la universidad es presencial, se debe asegurar que se expliquen los contenidos.

Por otra parte, el profesorado también tiene dudas sobre cómo poder abordar las clases de esta manera, entendiendo que puede ser molesto y más, teniendo en cuenta la experiencia de estos últimos meses, los cuales son reticentes al "poco feedback" que puede haber con el alumno. Además, también existen dudas en cuanto a la tecnología utilizada para poder ofrecer las clases de manera virtual.

En este sentido, habrá que ver cómo se desarrollan los diferentes meses, ya que la aparición de una posible cura podría hacer cambiar todo en un momento. De momento, se apuesta por este modelo que es el que se ha recomendado desde el ministerio y desde la consejería.