El presidente de la EMU y concejal de Vivienda y Transición Ecológica, Sergi Talamonte, y Xavier Mauri Coll, director general de la Fundación Hàbitat3, han firmado hoy un convenio que pone a disposición de la Empresa Municipal de Urbanismo 18 hogares repartidos por toda la ciudad destinados a familias con necesidades habitacionales.
Talamonte ha expresado su satisfacción por la firma de un convenio en el que se ha trabajado durante muchos meses y que incidirá en la garantía del derecho a la vivienda en Lleida y en la inclusión social de las personas usuarias. "Este acuerdo nos permite ampliar en un 6 por ciento el parque público de viviendas gestionadas por la EMU, que ahora está en 280, con estos nuevos se acerca a los 300 y queremos ir mucho más allá", ha dicho.
El concejal ha recordado que hace poco se firmó un convenio con la Agencia Catalana de Vivienda que, sumado a la firma de hoy, permite dar pasos adelante para recuperar pisos que están en manos de entidades financieras y ofrecerlos a las familias, "que son quienes realmente los necesitan". "Junto con la aprobación del protocolo de gestión de vivienda pública", ha añadido, "contaremos con herramientas útiles e importantes para que personas que no tienen acceso a un hogar en el sistema libre puedan disfrutar de este derecho y con unas condiciones dignas". Los precios del alquiler se ajustarán a la situación de los usuarios/as, sin superar el 30 % de sus ingresos.
Hàbitat3 es una fundación sin ánimo de lucro que gestiona más de 650 viviendas de alquiler social y de inclusión social en toda Cataluña, para personas con situación vulnerable. Los 18 pisos de Lleida serán los primeros que la fundación gestionará en estas comarcas.
Xavier Mauri ha remarcado que "se trata de una primera fase, ya que, por parte de la Fundación, existe el objetivo de seguir comprando viviendas en Lleida para poder seguir avanzando en esta colaboración y conseguir cifras más importantes". La ONU galardonó a Hàbitat3 el año pasado como proyecto innovador.
Esta fundación es una gestora de viviendas sociales de alquiler puesta a disposición, por un lado, de los proyectos de inclusión social de las entidades del Tercer Sector que requieren de hogares para poder llevarlos a cabo y, por otro, también de las administraciones públicas para atender demandas de pisos que desbordan los parques públicos actuales.