Una decena de militantes de las JERC han acudido esta tarde al Ayuntamiento de Lleida con la intención de hacer entrega de una placa de una calle de la ciudad dedicada a una persona con vinculación con el franquismo, en concreto de la calle Carmel Fenech. Cuando han intentado acceder a las dependencias municipales, agentes de la Guardia Urbana se lo han impedido y, finalmente, los miembros de las JERC han acabado optando por dejar la placa en la puerta de la Paeria. La acción llega después de que la noche del lunes pasado tres militantes de esta formación, dos chicos de 18 años y un menor de 15 años, fueran denunciados por la Guardia Urbana de Lleida por "despilfarro de mobiliario público", al ser sorprendidos cuando se disponían a arrancar una placa de la calle Alcalde Montaña, aunque llevaban cuatro placas de calles más. Desde las JERC han exigido al alcalde Àngel Ros "que deje limpia la ciudad de Lleida porque no hay lugar más adecuado para el fascismo que los museos" y han asegurado que "si no lo hace el Ayuntamiento, el antifascismo seguirá luchando día tras día por una ciudad digna y limpia de fascismo".
Desde las JERC Lleida han denunciado la actuación del "actual gobierno municipal de la vergüenza ya que no hace caso a las demandas populares reflejadas en las diferentes campañas antifascistas, como la manifestación del sábado pasado", organizada por la Plataforma Lleida Lliure de Franquisme para exigir la retirada de toda simbología franquista de la capital del Segrià. Desde las JERC consideran que "no es tolerable que ciertos personajes aún tengan honores en una ciudad que sufrió la cara más dura de la dictadura", según ha expuesto Oriol Olmo, militante de las JERC Lleida. En este sentido, desde la formación independentista han exigido al alcalde de Lleida, Àngel Ros, "que deje limpia la ciudad de Lleida porque no hay lugar más adecuado para el fascismo que los museos" y han asegurado que "si no lo hace el Ayuntamiento, el antifascismo seguirá luchando día tras día por una ciudad digna y limpia de fascismo". Según las JERC, los tres militantes de la formación fueron denunciados por "despilfarro de mobiliario público y están a la espera de que les llegue la denuncia" y "habrá que ver si el Ayuntamiento lo interpreta como un hurto de objetos de su propiedad o bien como una reivindicación política, es decir si nos denuncia por ladrones o nos ve por lo que somos, gente enfadada con la situación actual y con ganas de cambiar nuestra ciudad", según ha dicho Pol López. En este sentido, desde la formación han dejado claro que la retirada de placas de calles franquistas "no se ha hecho con mala intención sino para reivindicar que no queremos ningún símbolo de fascismo en las calles de la ciudad". La jefa de comunicación de JERC Lleida, Anna Barull, ha añadido que la Guardia Urbana requisó a los tres militantes denunciados la escalera y diferentes herramientas que llevaban para arrancar las placas de calles y ha denunciado que, seguidamente, los agentes fueron al coche de uno de estos militantes y le requisaron unos carteles de la formación con el lema 'destruimos el fascismo' "los cuales no estaban siendo utilizados en ese momento y no tenían ningún tipo de relación con la denuncia que les pusieron". Al margen de estos tres militantes de las JERC denunciados, cabe recordar que el martes que viene está previsto el juicio a tres jóvenes de la organización de la izquierda independentista Arran por haber retirado placas de calles dedicadas a personas con vinculación con el franquismo.
