El ladrón que murió este domingo por la tarde por disparos de un Mosso durante una persecución policial apuntó a los agentes con una pistola simulada. Así lo han confirmado a la ACN fuentes cercanas al caso, que revelan que las dos armas que llevaba el atracador no eran reales, aunque se está investigando si habían sido manipuladas y podían disparar. Estas mismas fuentes consultadas por la ACN también han explicado que la víctima habría recibido tres impactos de bala, al menos uno de ellos por la espalda, de uno de los dos policías que perseguían a los dos ladrones, que se sintió "amenazado" cuando el fugitivo les apuntó con el arma. Tal como adelantó este lunes la ACN, la muerte del presunto ladrón no fue fortuita ni fruto de una bala perdida a causa de los disparos intimidatorios, tal como se apuntaba inicialmente. Según las mismas fuentes, todos los disparos que impactaron al fugitivo los realizó uno de los mossos que los perseguían. El otro agente disparó al aire y efectuó unos ocho disparos intimidatorios. Fuentes cercanas al cuerpo policial defienden que se actuó de una manera "proporcionada" a la situación.
Según el comunicado hecho público ayer lunes, los Mossos d'Esquadra tuvieron conocimiento a las 19:37 horas del domingo 21 de mayo de que se había producido un atraco en la gasolinera de la calle Corts Catalanes de Lleida. Según las primeras informaciones, un trabajador de la gasolinera había resultado herido con un destornillador por los ladrones, quienes habían huido con una furgoneta y con la recaudación. De manera inmediata se montó un dispositivo policial para localizar el vehículo sospechoso. Una vez comprobada la matrícula facilitada por un testigo, se constató que la furgoneta constaba como sustraída en Reus el 20 de abril de 2017. Minutos después, una patrulla de mossos, que montaba un control estático a la altura del cementerio de Lleida, detectó este vehículo circulando por la carretera N-240 en dirección a Tarragona. Los agentes se pusieron a su lado haciendo uso de las luces prioritarias y señales acústicas para que se detuviera. A pesar de las claras indicaciones, sigue el comunicado, el conductor de la furgoneta embistió lateralmente el vehículo policial e intentó sacarlo de la vía. Durante la persecución, que transcurrió por los barrios de los Magraners y la Bordeta de Lleida, el vehículo escurridizo realizó una conducción temeraria poniendo en grave peligro al resto de usuarios de la vía. La furgoneta estuvo a punto de atropellar a una chica que tuvo que saltar para evitar ser embestida. El vehículo continuó la huida dirección a la calle Pla d'Urgell donde chocó con un vehículo que circulaba a baja velocidad por esa calle. Entonces, los mossos solicitaron la presencia de la Guardia Urbana de Lleida y asistencia sanitaria por si había alguna persona herida mientras continuaron el seguimiento de la furgoneta que a lo largo de su recorrido dañó otros vehículos. En un intento de despistar a los vehículos policiales, el conductor de la furgoneta salió de la vía en la calle Hostal de la Bordeta y circuló campo a través, rompiendo dos vallas metálicas de unas fincas. Finalmente se accidentó y quedó detenido en un terraplén y los dos ocupantes del vehículo salieron corriendo de manera que los agentes iniciaron un seguimiento a pie. Según las declaraciones de los agentes actuantes, uno de los atracadores habría apuntado con un arma a uno de los mossos, quien al sentirse amenazado hizo uso de su arma reglamentaria para repeler el ataque hiriendo mortalmente al atracador al que se le localizaron dos armas. Paralelamente, la otra persona, que se había escondido en el interior de un edificio, fue localizada por los mossos y quedó detenida. Es un hombre de 44 años, de nacionalidad española y vecino de Reus. Los dos atracadores acumulan numerosos antecedentes policiales por robos violentos, robo con fuerza, hurtos, robo con fuerza en interior de vehículo, robo y hurto de uso de vehículo y atentado y desobediencia a los agentes de la autoridad. El Área de Investigación Criminal de la Región Policial Ponent se ha hecho cargo de las indagaciones para aclarar las circunstancias de los hechos ocurridos. Asimismo, la División de Asuntos Internos ha abierto una Información Reservada tal y como se procede habitualmente en estos casos.
