La Audiencia de Lleida ha condenado al acusado de intentar matar a su exmujer a cuchilladas en Almacelles (Segrià) a nueve años y medio de prisión. Es la pena que pedía la fiscalía después de que el acusado reconociera, en el juicio celebrado el 1 de febrero, que el 10 de septiembre de 2015 atacó a su exmujer, de 37 años, cuando ésta salía de su casa. Los hechos tuvieron lugar a las 7.38h en el número 105 de la calle Mayor de la localidad. La sala ha tenido en cuenta la petición de todas las partes que pedían que se le aplicaran los atenuantes de reparación –en parte- del daño (ha pagado mil euros en concepto de indemnización) y de consumo de sustancias estupefacientes (dio positivo en drogas). La Audiencia también le condena a seis años de libertad vigilada una vez cumplida la pena de prisión y le prohíbe acercarse a menos de 150 metros de su exmujer durante diez años. La sala también ha condenado al acusado a indemnizar a su exmujer con 30.000 euros.
David S. C., de 38 años y vecino de Les Borges Blanques ha sido condenado a nueve años de prisión por un delito de intento de asesinato y medio año más por quebrantamiento de condena, ya que en el momento de la agresión tenía una orden de alejamiento por un delito de lesiones y amenazas a la mujer. Aparte de los atenuantes, la fiscalía solicitó también que se le aplicaran tres agravantes, que también han sido tenidos en cuenta por la sala. Por un lado, la alevosía, ya que consideraba demostrado que la voluntad del acusado era matar a su exmujer, ya que la atacó por sorpresa y sin que ésta se pudiera defender. Tal y como explicó la víctima, el hombre dejó de atacarla cuando la hija de ambos, al oír gritos, bajó y le dijo a su padre que parara. Por otra parte, solicitaba que se le aplicaran los agravantes de parentesco y por razón de género. El hombre, que tenía una orden de alejamiento de su exmujer hasta septiembre de 2017, reconoció que la esperó escondido en el portal y cuando llegó la apuñaló, primero en el cuello y después en el abdomen, con un cuchillo de 21 centímetros. La mujer reconoció en el juicio que habían discutido muchas veces pero que "no pensaba que fuera capaz de llegar a este extremo". Según las forenses, las heridas suponían un riesgo para la vida de la mujer ya que la del abdomen provocó una hemorragia considerable y la mujer "se podría haber desangrado" si los servicios médicos no hubieran intervenido con rapidez. Los Mossos también aseguraron que cuando llegaron al lugar "había mucha sangre". La víctima, que trabajaba en un comercio de Almacelles, fue trasladada al Hospital Universitario Arnau de Vilanova, donde estuvo ingresada durante una semana y posteriormente estuvo tres meses de baja para recuperarse de las heridas. Los Mossos d'Esquadra detuvieron al agresor el mismo día sobre las 14.50 horas en Almacelles.