Alcarràs, en la comarca del Segrià, es el último municipio de Cataluña, en el sentido geográfico más literal posible; pero últimamente, la película "Alcarràs", ganadora del Oso de Oro de la Berlinale 2022, lo ha colocado en el centro del mundo cinematográfico a nivel europeo, provocando en la población, una explosión de autoestima y orgullo.
Jordi Janés, alcalde de Alcarràs, habla en esta entrevista para La Ciutat. Como en todas partes, nada más empezar la legislatura, la Covid hizo acto de presencia en Alcarràs. ¿Cómo lo habéis gestionado?
En esta legislatura el equipo de gobierno empezábamos de nuevo y nos encontramos con esta crisis tan enorme. Alcarràs fue un municipio muy afectado, hasta llegar al cierre perimetral con las complicaciones que esto trajo.
Aquí uno de los sectores más fuertes es la pagesia y todo lo derivado de la temporada de la recogida de la fruta. Esto nos hace venir una cantidad de personas que puede hacer crecer un 30-40% el número de población que somos habitualmente. Esto quiere decir que hay que multiplicar la recogida de basuras, limpieza de las calles, todos los servicios que ofrece el Ayuntamiento. En plena pandemia llegaba gente de todas partes porque en Alcarràs tenemos hasta 50 nacionalidades diferentes. La vacunación fue bastante bien y nos hemos ido saliendo. Han sido años muy duros. Ahora esperamos ver si la guerra de Ucrania nos afectará y cómo lo hará.
¿De qué manera pensáis que os puede afectar esta guerra?
Nos puede afectar porque Ucrania proporciona mucho cereal, especialmente maíz, muy necesario para el sector ganadero. En Alcarràs tenemos 24.000 cabezas de ganado porcino y unos 45.000 de bovino. Hablé con la subdelegación del Gobierno de España y no garantizaban el suministro de grano y pienso más allá de 8 semanas. Esto es preocupante porque podemos tener problemas de suministro de pienso y hay que estar preparados. Es inconcebible que pueda faltar pienso para los animales. Aquí tenemos carne de primera calidad que se exporta por todo el mundo y de hecho, el Puerto de Tarragona es nuestro puerto de salida de productos y mercancías.
A nivel de infraestructuras para trasladar y transportar personas y mercancías, en el caso de las comarcas de Lleida, ¿mejor el tren?
Sí, el AVE ha acortado las distancias, pero es injusto el agravio tarifario respecto al resto de España. No tiene lógica el precio de cubrir distancias debería ser equiparativo para todos. Esto nos haría aún más competitivos. Ya que a los municipios nos lo hacen licitar todo con transparencia, la red ferroviaria debería entrar con más competencia, disponibilidad y abaratamiento de los costes de desplazamiento.
Ahora que parece que estamos en la recta final de la pandemia se impone una reactivación económica de primer orden. ¿Cómo lo hacéis en Alcarràs?
El sector de la restauración y el comercio fue uno de los más afectados. Estamos poniendo mucho esfuerzo en dinamizarlo y apoyarlo porque aquí tenemos muchos comercios. Somos el pueblo más grande del Baix Segrià y el quinto en población en las comarcas de Lleida. Entonces desde el Ayuntamiento ofrecemos ayuda económica a la Asociación de Comerciantes mediante subvenciones, así como al tejido empresarial y comercial de nuestro municipio, para poder ir saliendo.
De todos modos, las últimas semanas, con el éxito de la película "Alcarràs", estáis pasando un momento dulce, ¿no?
La película nos ha caído como una lotería. Carla Simón, ganando el Oso de Oro en el festival de cine de Berlín nos ha situado en el mundo. Es la mejor campaña publicitaria que nunca ha tenido Alcarràs. El eco que ha tenido es impagable y anímicamente esto también ha ido muy bien.
Los comercios están llenos de motivos de la película, continuamente estamos haciendo actos sobre esto. Hemos celebrado las rutas floridas con sintonía con la peli, haciendo photocalls con el nombre de Alcarràs y con tributos a la película. Y esto sólo ha empezado porque como Carla es muy buena directora, irán saliendo más premios y tendremos popularidad durante un tiempo. Esto lo tenemos que saber aprovechar.
¿Tenéis pensado cómo aprovecharéis este buen momento?
Aquí tenemos mucho comercio y empresas de una envergadura considerable: centrales de fruta, fabricantes de cooperativas de la cadena alimentaria y envasado, de maquinaria agrícola. Es interesante que las empresas se sintonicen con esta popularidad que tenemos, y que irá a más cuando la película se estrene el día 29 de abril.
Gracias a la película tendremos un turismo que no teníamos explotado y tenemos que saber gestionarlo y aprovechar porque la gente venga a las tierras de poniente, que nos conozcan bien, la fruta que se hace de primera calidad y también la carne que se produce aquí. Nos tenemos que creer la calidad que hacemos y dar a conocer unas tierras que han sido muy castigadas y muy olvidadas.
Película aparte, Alcarràs es un pueblo culturalmente muy rico, con asociaciones, entidades, fiestas tradicionales, ¿qué podéis explicar?
En Alcarràs tenemos clubes de teatro que se han profesionalizado y de los que ha salido gente que han hecho del teatro su profesión en productoras. Aparte, tenemos hasta una cuarentena de entidades culturales que contribuyen a dinamizar la infraestructura municipal que tenemos en los centros culturales. Contad que somos casi 10.500 personas en Alcarràs y cada día salen entidades nuevas. Tenemos unas 40 de culturales y sociales y una cuarentena más de deportivas con buenos resultados: balonmano es muy bueno, el fútbol lo tenemos en la primera categoría, los del fútbol sala están en primera catalana…
Si el Ayuntamiento dispusiera de más presupuesto se podrían ampliar las instalaciones deportivas porque vemos que la inversión en deporte nos devuelve con éxitos y con gente premiada. Por otra parte, en este momento la película "Alcarràs" es la brasa y la llama de nuestro mundo cultural. Mucha gente del municipio se ha sentido la peli muy suya, porque hay vecinos que salen y mucha gente pasó por el casting. Y esto sin olvidar los grupos de teatro, danza y se sienten muy suya la cultura viva en Alcarràs.
Aparte de las cuestiones anímicas, los ayuntamientos también se encargan de calles, plazas y limpieza. ¿Cómo gestionáis estos aspectos en Alcarràs?
Cuando nosotros entramos a gobernar encontramos unas calles muy desordenadas. Personalmente yo soy un anti plástico y hemos hecho unas campañas muy fuertes en este sentido. Tanto la Generalitat como el SOC nos ha apoyado para poner personas a limpiar calles. Hemos recogido toneladas de plástico. En Alcarràs hemos tenido un crecimiento urbanístico muy rápido y quedaron obras vacías, patios desencajados que estaban llenos de plásticos, latas... Hemos hecho una limpieza muy fuerte y necesaria porque cuanto más gente hay en el pueblo, más ensucian. En este aspecto nos marcamos el reto de tenerlo todo limpio y ahora cuando me miro el pueblo pienso que está bastante bien.
Un pueblo también tiene que ser bonito para que la gente se lo sienta suyo: calles limpias, una jardinería bien puesta, señales y pintura del municipio, todo tiene que estar bien arreglado. Hemos hecho mucha inversión en pintura en los pasos de peatones, zonas de carga y descarga, direcciones... Estamos muy encima. Hemos estado los dos últimos años arreglando todos los parques infantiles porque los que tenemos niños pequeños y los llevas al parque no quieres tener los hierros oxidados, la pintura desgastada o la madera astillada.
También hemos hecho una gran inversión en los polígonos industriales porque estaban muy abandonados en cuanto a iluminación, seguridad y limpieza.
También nos hemos adherido a las Villas Floridas de Cataluña mejorando la jardinería del pueblo, los accesos al municipio para que cuando la gente venga a Alcarràs, y más ahora que somos famosos, las entradas hagan gozo.
Veo que dais mucha importancia a la jardinería urbana?
Si. Geográficamente somos el último pueblo de Cataluña pero queremos ser el primer portal de Cataluña y por lo tanto, tenemos que estar a la altura: Por lo tanto, las entradas deben estar bien iluminadas, la jardinería cuidada... en el centro del pueblo también hemos hecho una inversión en jardinería y flores ornamentales. La gente, cuando va por la calle lo agradece.
Y a nivel urbanístico, ¿qué actuaciones estáis haciendo?
En Alcarràs procuramos cuidar el urbanismo del pueblo. Estamos arreglando plazas, estamos terminando una calle que hacía 15 años que esperaba ser acondicionada para tener mejor acceso. Como el pueblo ha crecido mucho hemos tenido que hacer un segundo cementerio. Para que se vea la magnitud de cómo Alcarràs explota, la población entre los años 2000 al 2010 ha pasado de ser de cerca de 5.000 personas a cerca de 10.500. Esto es muy bonito, pero los servicios quedan pequeños: el polideportivo, las piscinas, el cementerio, e incluso el mismo Ayuntamiento, porque cuanta más población hay, más personal funcionario técnico hay que coger.
¿Cómo os planteáis la transición energética?
Esta es la próxima revolución y la hemos empezado hace mucho tiempo. En Alcarràs apostamos por la sostenibilidad, el respeto medioambiental, la posibilidad de las renovables. A nivel municipal ya hace unos cuantos años que hacemos la recogida puerta a puerta pasando del 19% al 80% de reciclaje. También tenemos luz led en todo el municipio y tantas placas solares como podemos.
El sector ganadero es el primero involucrado en esta responsabilidad. Hay una planta de purines y se está proyectando una segunda. Una de las actividades más interesantes es la planta de compostaje. Se trata del estiércol del sector bovino más lo que se recoge de los árboles que se arrancan de variedades que tienen una durabilidad de 8 a 12 años. Cuando se cortan se llevan a esta planta, se desmenuzan, los restos se juntan en el compost y se obtiene un compost ecológico, revalorizando lo que era un residuo que ha pasado a ser un subproducto útil.
Esto es un cambio de chip. Se están haciendo entre 5 y 6 plantas de compostaje que no contaminarán, reducirán nitratos y proporcionarán un subproducto que se puede revalorizar aportando un ingreso cuando antes era un gasto para el tratamiento de los residuos. Alcarràs también tendrá un gran protagonismo con el tema energético...
Si se acaba haciendo, se instalará en nuestro municipio el mayor parque de placas solares que habrá en Cataluña. Estamos hablando de 150 hectáreas con 350 megavatios de potencia. Seremos el 10% de la energía renovable de Cataluña en 2030 y desde aquí se suministrará luz a 200.000 personas.
En pocos años nos definiremos y pasaremos de tener una etiqueta amarilla a otra de verde radical, porque desde el Ayuntamiento queremos seguir apostando por ser más sostenibles. El mundo que nos han dejado nuestros padres nosotros ya estamos para dejarlo a nuestros hijos y dentro de nuestras posibilidades les tenemos que dejar un país más limpio y ordenado.
