Joan Talarn elogia la apuesta de la Feria del Aceite y la Piedra por potenciar los elementos que identifican a Vinaixa y le otorgan singularidad

27 de marzo de 2022 a las 17:30h

El presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, ha visitado este domingo la Feria del Aceite y la Piedra de Vinaixa, que este fin de semana celebra su 19ª edición.

Talarn, que ha estado acompañado por el diputado Carles Gibert, ha sido recibido por el alcalde, Josep M. Tarragó, y el resto de la corporación municipal, antes de trasladarse al espacio de la Feria, donde han hecho un recorrido. Posteriormente se han desplazado a la Cooperativa de Vinaixa, donde han sido recibidos por su presidenta, Teresa Gallart, y el resto de miembros de la junta.

Joan Talarn también ha visitado la Casa Poblet, del siglo XIV y declarada Bien Cultural de Interés Nacional y que se está restaurando, y el Centro Cívico, donde había una exposición de litografías. La estancia del presidente en Vinaixa ha terminado en la plaza de los Árboles. Allí ha dirigido unas palabras a los presentes en las que el presidente de la Diputación ha felicitado a Vinaixa por el hecho de "recuperar el espíritu" de una feria que en los últimos dos años no se había podido celebrar a raíz de la pandemia.

En este punto, Talarn ha querido poner en valor el papel "promotor" de los ayuntamientos, que están siempre al frente de estas "manifestaciones socioeconómicas tan importantes" que son las ferias, y que, como no podía ser de otra manera, para hacerlo cuentan permanentemente con el apoyo de la Diputación.

En el caso de Vinaixa, este "esfuerzo colectivo y cooperativo en torno al aceite y a la cultura de la piedra seca" da como resultado una feria que genera riqueza, desarrollo comercial y que es un elemento de atracción y fidelización de las personas al territorio. La feria es, pues, un evento que ayuda a mejorar la calidad y las condiciones de vida, a reivindicar los municipios rurales ante las grandes ciudades, a fomentar la vida social y los contactos, y a "arraigar personas al territorio", ha remarcado el presidente. Y esto es así en base a "cuidar y potenciar sus singularidades", sus productos, su forma de elaborarlos y el aprecio a sus orígenes culturales, ha terminado Joan Talarn.

Por todo ello, Talarn ha remarcado la importancia de recuperar las más de 200 ferias que se hacen en el territorio de Lleida y que no se pudieron celebrar durante el tiempo de pandemia, porque ayudan a levantar la economía y también la vida social, con lo cual son una herramienta contra la despoblación y evitan que se vacíen los pueblos, y "si se vacía el territorio, también se vacía Cataluña".

Ciertamente, la feria de Vinaixa ha reforzado este año la voluntad de relacionar todos los actos con el aceite y la piedra, de la misma manera que se ha centrado en la promoción de los productos de proximidad. Además, ha recuperado el formato de tres días, en lugar de una jornada única como se hacía últimamente. Así, el certamen se puso en marcha el viernes, en una jornada en la que se contó con la presencia de la consejera de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, Teresa Jordà.

A lo largo de las tres jornadas de actividad, se han hecho exposiciones, caminatas, maridajes, rutas guiadas, degustaciones, una demostración de la técnica milenaria de la piedra seca a cargo de los Amigos de la Arquitectura Popular, catas de cerveza, demostraciones gastronómicas, talleres de cocina, una charla sobre los beneficios del aceite de oliva, a cargo de la nutricionista Antonieta Barahona, la ponencia 'Agricultura y paisajes de piedra seca… ¿Qué futuro?', a cargo de Pau Moragas, de la Olivera Cooperativa, y la entrega de los premios del primer concurso de pintura seca.