El Gobierno y el sector agrario han acordado destinar 7 millones de euros para compensar las 14.000 hectáreas incluidas en las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) que no pueden acceder al regadío. El entendimiento se ha alcanzado este viernes en una reunión en Tàrrega entre representantes de los agricultores y de los departamentos de Agricultura y Territorio, después de que un primer encuentro a principios de diciembre acabara sin acuerdo
El acuerdo prevé ayudas de entre 250 y 500 euros por hectárea como medida compensatoria por la imposibilidad de regar estas fincas, con la condición de que se desarrollen en ellas servicios ecosistémicos que aún deben concretarse. Paralelamente, también se ha pactado impulsar la creación del Órgano Rector de las ZEPA a partir del mes de enero, que se encargará de hacer seguimiento de la gestión de estos espacios protegidos
En este nuevo órgano, el 51% de los miembros serán representantes de la administración, mientras que el resto corresponderá a agentes agrarios, representantes municipales, ecologistas y propietarios, entre otros perfiles. La reunión ha tenido lugar en un contexto de movilización del sector, con más de un centenar de tractores concentrados en la capital de l'Urgell
En la negociación han participado representantes de Unió de Pagesos, Asaja, Revolta Pagesa, Pagesos o Conills, la Comunidad de Regantes del Segarra-Garrigues, JARC y Assemblea Pagesa. Entre los acuerdos alcanzados, el sector también ha celebrado la revisión de la normativa que regula la actividad de las granjas y de las plantas de compostaje dentro de las fincas ZEPA. En este último caso, se ha acordado que estas instalaciones estén permitidas siempre que traten productos de origen agrícola.
Las organizaciones agrarias han valorado positivamente el giro en las negociaciones respecto al encuentro anterior. “Roma no se hizo en un día, pero en comparación a la reunión del día 1 de diciembre, estas medidas se valoran de manera positiva”, ha afirmado el presidente de Asaja Catalunya, Pere Roqué, que también ha agradecido la participación de los agricultores en las tractoradas de Tàrrega y Lleida. En la misma línea, la responsable de Medio Ambiente de Unió de Pagesos, Carol Aixut, ha destacado que “si bien se deben acabar de estudiar pequeños detalles, se han dado pasos importantes”.
Desde el territorio, Rafael Piqué, de la comunidad de regantes del Segarra-Garrigues y socio de JARC, ha subrayado que la voluntad negociadora del Govern “ha sido totalmente diferente”, mientras que Gerard Batalla, miembro de Assemblea Pagesa, ha concluido que la propuesta “puede ayudar a desencallar el conflicto”.
Por parte del Gobierno, el director general de Regadíos y Espacios Agrarios, Xavier Gispert, también ha hecho una valoración positiva de la reunión. Ha asegurado que “después de mucho tiempo se ha establecido una mesa de diálogo” y que “se tendrá en cuenta el sector para llegar a buenos acuerdos”. Asimismo, ha remarcado que “se pueden llegar a pactos teniendo en cuenta el marco legal, sin olvidar que tenemos un encargo de la Declaración de Impacto Ambiental”.
