Esta mañana, en La Seu Vella, Esquerra Republicana de Catalunya y Junts per Catalunya Lleida, han firmado un acuerdo que establece el apoyo a la investidura de Miquel Pueyo como alcalde de Lleida y la voluntad de cerrar un gobierno de coalición en la Paeria para los próximos cuatro años, el cual se acabará de concretar en los próximos días.
Las dos formaciones consideran que el acuerdo responde a la visión compartida del modelo de ciudad y es coherente con los resultados de las elecciones municipales del 26 de mayo de 2019, que han expresado con claridad una voluntad de cambio honesto en la ciudad de Lleida, después de casi 40 años de gobierno de un mismo partido. Asimismo, constatan que es necesario poner en marcha un proceso de regeneración democrática y de transformación de la ciudad, inspirados por los valores republicanos, la transparencia, la sostenibilidad y comprometidos con la justicia social.
En este sentido, Esquerra Republicana de Catalunya y Junts per Catalunya Lleida están trabajando para cerrar un acuerdo de gobierno estable basado en cinco ejes: una ciudad cercana, conectada, comprometida, saludable y justa.
Una ciudad cercana, que garantice el acceso a la cultura, la educación y el trabajo, que tenga un modelo de comercio de proximidad y apueste por el desarrollo del Plan de la Estación; que fomente el emprendimiento y la transformación industrial, con políticas de atracción de inversiones, incentivos y puesta a disposición de suelo; que impulse una economía innovadora, solidaria, social y sostenible; que base el gasto público y el modelo de gestión pública en el rigor, el rendimiento de cuentas, la transparencia y las finanzas éticas.
Por una ciudad conectada, que apueste por los vehículos eléctricos y sin motor, y mejore la eficiencia del transporte público; que defienda un modelo urbanístico no especulativo e impulse un nuevo POUM para hacer de Lleida una ciudad inclusiva, amable, verde y socialmente cohesionada; que valore la Huerta, Sucs y Raimat y que apueste decididamente por la transición energética.
Una ciudad comprometida con la memoria histórica, que se ponga al lado de la Generalitat y el Parlamento de Cataluña en la defensa del mandato del 1 de octubre y en seguir trabajando en la defensa del derecho a la autodeterminación, la libertad de los presos políticos y el retorno de los exiliados; con un compromiso firme con la lengua y la cultura catalanas como medios de cohesión de nuestra sociedad y recuperando el catalán como lengua de uso preferente de la Paeria. Una ciudad valiente en la revisión y control de las concesiones públicas para mejorar los servicios de limpieza, transporte, alumbrado o agua; comprometida con la lucha contra la corrupción, la violencia machista y las actitudes xenófobas y discriminatorias.
Una ciudad saludable, que priorice la educación afectivo-sexual, la prevención, promoción y acceso a la salud, el envejecimiento saludable y que fomente la actividad física y el deporte en la ciudad, impulsando especialmente el femenino y el adaptado.
Una ciudad justa, que apueste por la cohesión social, garantice el acceso efectivo a los derechos básicos y que trabaje para reducir las desigualdades; que fomente el incremento de la vivienda pública y de protección social; que luche contra los desahucios y la pobreza energética; y que desarrolle políticas transversales para atender la diversidad, desde una mirada de ciudad feminista.
