La tecnología y la inteligencia artificial ha incorporado aspectos esenciales para la sanidad, pero uno de los últimos episodios ha indignado a la población de un municipio de Lleida. Una mujer de 74 años acudió el pasado 30 de enero al departamento de Urgencias del CAP de Pont de Suert porque le hacía daño la oreja.
El problema llegó cuando las administrativas del Centro de Atención Primaria denegaron su consulta debido a un algoritmo del ordenador. El programa informático basado en inteligencia artificial determinó que su caso no requería una atención urgente, lo que obligó a la mujer a abandonar el centro sanitario.
La paciente tuvo que volver al día siguiente para ser atendida por su médico de cabecera
Tal y como ha informado Telecinco, Mónica Ricou, hija de la afectada y profesora de Estudios de Derecho y Ciencias Políticas de la UOC denunció los hechos. "No puedes enviar a casa a una persona vulnerable con dolor. No sabes nunca lo que puede tener, solo lo puede decir un facultativo médico", criticó la hija de la víctima.
Además, Mónica Ricou aseguró que desde el CAP "restringieron el derecho a la salud" de su madre, quien sufre "asma, artrosis y migraña". Sin embargo, el día siguiente de los hechos fue atendida por su médico de cabecera, quien le detectó otitis, una infección que el programa del Instituto Catalán de la Salud no lo considera como "urgente".
Aunque los directivos de Atención Primaria de las comarcas del Pirineo aseguraron que la actuación fue correcta, la hija de la afectada consideró que "unas administrativas no te pueden decir que vuelvas a casa". Finalmente, la paciente se recuperó de la otitis, pero pidieron a las autoridades una mejor interpretación del algoritmo para evitar problemas fatales por un mal diagnóstico.