Cervera declara al obispo Novell persona 'non grata'

31 de mayo de 2017 a las 14:29h
El pleno de la Paeria de Cervera ha declarado al obispo de Solsona, Xavier Novell, 'persona non grata' e instar al Parlamento a hacer lo mismo en ''defensa de los derechos de los homosexuales''. El texto de la moción que ha presentado y defendido el alcalde Ramon Royes a raíz de la glosa de Novell de hace dos domingos cuando relacionó la ''confusión sexual'' de chicos adolescentes con la ausencia de la figura de padre, ha sido aprobado con los votos a favor de 3 de los 4 concejales del PDeCAT, 1 de la CUP, y el del concejal no adscrito que forma parte del gobierno y se presentó por el PPC. Las abstenciones han sido las de los 2 concejales de MES, 1 del PDeCAT, 1 de SiF, 1 de InSE, y 1 del PSC. En contra ha votado los 2 concejales de ERC, que han considerado la medida desproporcionada. Royes ha apelado a la ''valentía de la clase política'' para sacar adelante mociones como ésta y ha asegurado que para él no ha sido ''agradable ya que en los últimos días ha recibido insultos y amenazas anónimas que ya ha puesto en conocimiento de los Mossos d'Esquadra.
Ramon Royes ha justificado la presentación de la moción por el hecho de que Cervera forma parte de la Diócesis de Solsona y las declaraciones del obispo tratando la homosexualidad como ''un problema o una enfermedad que se debe curar'' son una ''auténtica aberración''. En este sentido, el paer en cap ha hecho referencia a la gente que ha tenido una ''tendencia sexual diferente a la tradicional que durante décadas ha sufrido muchísimo'', y por tanto que con esto ''no podemos ceder de ninguna manera y debemos ser rigurosos''. Según Royes, la declaración de Novell como persona 'non grata' en Cervera tiene una ''carga simbólica muy importante'' porque supone una ''sacudida a toda una Iglesia'' desde un municipio como Cervera. El alcalde ha dicho que quiere ser también una invitación a la reflexión y que a efectos prácticos supone que ''sencillamente'' él como paer en cap y los concejales que se han sumado dejarán de asistir a los actos donde esté el obispo, sean o no sean organizados por el Obispado. Royes también ha querido poner de manifiesto que presentar una moción de estas características ''no es agradable'' y ha denunciado que en los últimos días ha recibido ''insultos y amenazas'' a través de las redes sociales y por correo electrónico. El alcalde ha puesto en conocimiento de los Mossos d'Esquadra estas amenazas pero ha dicho que muy probablemente no sacará adelante ningún tipo de denuncia. En este sentido, el debate de la moción ha vivido momentos de tensión cuando los dos concejales de ERC han manifestado que votarían en contra al considerar la declaración de persona 'non grata' desproporcionada. Royes les ha acusado de falta de valentía y ellos han respondido que no están de acuerdo con las afirmaciones del obispo pero que creen que una declaración de estas características no servirá para nada. En la moción aprobada por 5 votos a favor, 6 abstenciones y 2 votos en contra señala que la Paeria de Cervera se posiciona ''sin ambigüedad'' a favor de los derechos y libertades de las personas, entre ellos la libertad sexual y también las diferentes formas de entender la familia, incluida la formada por personas del mismo sexo. En este sentido, hace referencia al artículo del Full Diocesà del Obispado de Solsona del 21 de mayo de 2017, titulado 'Amor que se vuelve fecundo (1)' del obispo Novell, donde hablaba de la familia y lo hacía insistiendo en la necesidad de que la figura del padre y la madre estuvieran perfectamente definidas. Según la moción, las declaraciones del obispo de Solsona son homófobas, anacrónicas y vulneran los derechos y libertades de las personas. En este sentido entiende que ''hay un trato discriminatorio hacia las personas homosexuales'' por parte del obispo, ya que lo relaciona con una posible carencia de la figura paternal, dando a entender que la homosexualidad es un problema, una desviación o un defecto de las personas. Por otra parte, la moción se justifica partiendo de la base de que las personas con responsabilidades políticas tienen la obligación de ''manifestar con valentía y determinación nuestra posición clara y nítida a favor de la defensa de los derechos de todas las personas sin distinción de raza, color, sexo, lengua, religión, opinión política, orientación sexual o de cualquier otra clase''. Asimismo, el texto manifiesta el ''máximo de respeto hacia las personas creyentes pero el rechazo a esta forma de pensar y al discurso del obispo de Solsona, ya que tiene una responsabilidad muy grande por su cargo a la hora de generar opinión. La opinión del obispo Novell ha generado una avalancha de críticas tanto desde diferentes administraciones como desde colectivos que defienden los derechos LGTBI. El Observatorio contra la Homofobia ha denunciado a Novell al Gobierno porque considera que sus afirmaciones han vulnerado la ley y el domingo pasado hubo una protesta ante la iglesia de Tàrrega, donde el obispo estaba oficiando confirmaciones, que obligó a Novell a salir escoltado por la policía del templo. Ayer lunes, el alcalde de Solsona pidió al obispo públicamente que exprese disculpas y retire sus declaraciones bajo la amenaza de que el consistorio rompa relaciones con el obispado. Desde el Ayuntamiento de Tàrrega y Mollerussa, que también forman parte de la diócesis, también se ha rechazado la opinión de Novell.