La pareja detenida el martes en Artesa de Segre por la muerte de su bebé, de sólo tres meses, ha negado este viernes en el juzgado cualquier implicación en los hechos. Según los abogados de la defensa, Manel Viola y Andrés Ibañez, ambos han asegurado que el lunes por la mañana se despertaron y encontraron al niño muerto. El informe preliminar de los forenses, sin embargo, revelaría indicios "contundentes" de criminalidad, según han informado fuentes cercanas al caso a la ACN. De hecho, los Mossos d'Esquadra tienen abierta la investigación por asesinato. La pareja ha declarado por separado en el juzgado de instrucción 1 de Balaguer. El juez decidirá esta tarde si ordena prisión provisional para ambos, tal y como pide la fiscalía, o los deja en libertad.
Los detenidos son un hombre, de 32 años, y una chica, de 19, de nacionalidad brasileña. Ambos han llegado a los juzgados de Balaguer a las doce menos cuarto de la mañana de este viernes y han estado declarando hasta las cuatro menos cuarto de la tarde. Con la declaración de ambos, el informe preliminar del forense y la documentación aportada fruto de la investigación de los Mossos, el juez decidirá si establece alguna medida cautelar.
La fiscalía ha pedido que se ordene prisión provisional para ambos al entender que existen indicios suficientes que apuntan a que se trataría de una muerte criminal, mientras que la defensa pide la puesta en libertad al asegurar que no existe ninguna prueba ni indicio que permita inducir que los padres sean los culpables de la muerte del niño.
Los hechos tuvieron lugar sobre las siete de la mañana del lunes. Los Mossos recibieron un aviso según el cual el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) había tenido que asistir a un bebé en parada cardiorrespiratoria. A pesar de los esfuerzos de los sanitarios por reanimarlo, finalmente murió. Los Mossos detuvieron a los padres el martes y han estado en la comisaría hasta este viernes, que han pasado a disposición judicial.
