La Unió de Pagesos estima que, de cara a la próxima campaña agraria que arrancará en mayo, necesitará incorporar a 45.000 personas: 30.000 en el campo y 15.000 en las cámaras de fruta.
La buena previsión de cosecha hará que la campaña de Poniente se pise con la de otros puntos frutícolas del Estado, como Murcia, y eso provoca que, de momento, los productores catalanes sólo tengan garantizados 15.000 de estos trabajadores, es decir, un tercio de los que necesitan. Afirman que si no cubren la mano de obra no podrán cosechar la fruta y, por ello, exigen el desarrollo urgente del nuevo reglamento de extranjería para que los campesinos puedan ofrecer permisos excepcionales de trabajo a personas sin papeles.
