Un hombre de 52 años ha sido detenido la madrugada de este viernes por los Mossos d’Esquadra tras una huida espectacular que le llevó a empotrar un coche robado contra cinco establecimientos de El Pla d’Urgell y L’Urgell, y después escapar en dirección contraria por la A-2 durante un total de 22 kilómetros.
La secuencia de acontecimientos comenzó hacia las 00.20 horas, cuando los Mossos recibieron un primer aviso sobre un intento de robo en una empresa de Bellpuig. El sospechoso, a bordo de un vehículo todoterreno, había colisionado con la fachada del local y había huido sin robar nada. Poco después, otra denuncia alertó a los agentes de un segundo empotramiento, en este caso en la óptica situada en la calle Ciutat de Lleida, en Mollerussa.
Los Mossos iniciaron inmediatamente un dispositivo de búsqueda, y a las pocas horas, localizaron el vehículo sospechoso en Ivars d’Urgell. Cuando los agentes le ordenaron detenerse, el conductor aceleró y saltó el control policial. Accedió a la A-2 en dirección contraria , poniendo en peligro la vida de muchos usuarios de la carretera.
Tras circular durante 22 kilómetros por la calzada contraria, el vehículo fue interceptado por un coche patrulla a la altura de Cervera. En la detención, se confirmó que el individuo estaba implicado en otros encastecidos ocurridos esa misma noche, en las oficinas de una cooperativa de Ivars d’Urgell, un supermercado de Riudarenes y un lavadero de coches de Vila-sana.
Además de los destrozos materiales, los Mossos determinaron que el hombre había sustraído el vehículo en Arbeca, tras huir de una gasolinera de La Guinguenta sin pagar por la gasolina.
El individuo fue arrestado y los Mossos lo acusan de cinco robos con fuerza en grado de tentativa, estafa, conducción temeraria, así como robo y hurto de uso de vehículo. Los agentes continúan investigando los hechos para determinar posibles implicaciones en otros delitos.