Una patrulla de la Policía Local de Tàrrega salvó ayer lunes la vida de un bebé de siete meses que se estaba ahogando. Los hechos ocurrieron en la calle de Folch i Torres hacia las 3:00 de la noche, cuando los agentes que realizaban un servicio ordinario se encontraron en la calle. un grupo de gente con una niña de corta edad en brazos dispuestos a llevarla en coche al CAP.
Viendo que el bebé se había enojado sin poder respirar y que podía morir durante el traslado, uno de los agentes optó por practicarle allí mismo en seguida la maniobra de Heimlich (una compresión abdominal) hasta que el niño expulsó un trozo de comida sólida que le taponaba la garganta, salvándole así la vida.
Cuando llegó la ambulancia al lugar de los hechos, la niña, que se llama Samantha, ya se encontraba estable y respiraba con normalidad. Sin embargo, fue trasladada al Hospital Arnau de Vilanova de Lleida para hacerle una exploración y comprobar que no tenía más restos de comida en el cuello. En la madrugada se encontraba completamente recuperada y ya ha recibido el alta.
La rápida acción de los agentes se ha convertido en clave para que la Samantha salvara la vida, ya que con toda probabilidad hubiera podido morir durante el traslado al CAP. La familia ha expresado el agradecimiento hacia la Policía Local por su eficaz intervención.
Cabe decir que la Policía Local realiza periódicamente cursos de primeros auxilios además de llevar a los vehículos equipos de emergencia (como desfibriladores) con los que atender las primeras acciones de recuperación en el lugar de los hechos.