Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado domingo en Lleida a tres hombres acusados de coaccionar al inquilino de una habitación que no pagaba el alquiler desde hacía unos meses. Concretamente, se les acusa de presuntos delitos de coacciones, violación de domicilio y lesiones leves.
Los hechos ocurrieron el domingo por la tarde cuando los Mossos recibieron el aviso por unos altercados en un edificio del barrio de Cappont. Según ha explicado la policía, al llegar al lugar los agentes vieron bolsas de ropa y varios objetos tirados por el suelo en el acceso al edificio.
Al subir a la primera planta, se encontraron con la pelea, con una persona tirada en el pasillo y tres hombres que salían de una habitación, uno de ellos cargado con objetos.
Tras hablar con la víctima, los agentes constataron que los tres agresores habían ido a desalojarlo por la fuerza de la habitación porque hacía unos meses que no podía pagar su alquiler.
Lo habían agredido y uno de ellos le había cogido el teléfono para evitar que llamara a la policía. Según los Mossos, estas personas no dieron ninguna explicación coherente de qué hacían en ese momento en el piso y, ante las evidencias, fueron detenidos.
Los agentes encontraron que uno de ellos, el que parecía liderar el grupo y que se había mostrado muy agresivo y poco colaborador, llevaba en el bolsillo el teléfono de la persona agredida y unas llaves del piso. Todo apuntaba a que el propietario del piso los habría contactado para obligar a marcharse al inquilino ante los impagos. Dos de los detenidos tienen antecedentes.