Las excavaciones arqueológicas en el solar donde se construirá la nueva estación de autobuses, junto a la estación de tren Lleida-Pirineos, han puesto punto final hoy con diferentes hallazgos arqueológicos que se incorporarán al Archivo Arqueológico de Lleida. El alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, ha visitado hoy las obras de la nueva estación que se iniciaron durante el mes de mayo y lo ha hecho junto con la teniente de alcalde, Begoña Iglesias, y otros miembros de la corporación municipal como el arqueólogo Xavier Llogaia.

Durante la visita se ha explicado varias historias de la antigua orilla izquierda del río Noguerola y el camino de Menàrguens, de la Ilerda romana del Siglo I AC – V DC. Durante los trabajos de excavación se han recuperado materiales de época romana como un manjar de hueso de un cuchillo y un fragmento de mosaico de una posible lauda sepulcral. En los últimos trabajos de excavación se han descubierto unos antiguos hospedajes para la gente que venía al mercado.
Se han localizado “viviendas en el barrio de San Pablo del Mercadal, donde desde 1174 cada jueves se reunía mucha población para comprar y vender sus productos”. En este caso, la excavación ha permitido localizar la estructura de dos calles y una serie de viviendas con restos cerámicos de los siglos XIII y XIV. Derribadas en 1366 cuando se hizo una nueva muralla de defensa de la ciudad, pasaron a ser una zona de huertos.
Según Xavier Bofaruecos, “parece que no son casas de propietarios diferentes, sino que son dos edificaciones construidas, muy bien planificadas, que habría junto al camino de Menàrguens, que es uno de los caminos de salida de la ciudad medieval histórica hacia el Pirineo oriental”.
“Hoy es el último día que se está haciendo estos trabajos de arqueología con el fin de terminar de documentar toda la información que nos aporta esta excavación. Las obras de la nueva estación tienen una afectación directa sobre dos espacios patrimoniales que eran muy visibles antes, la antigua harinera de La Meta y la otra los Docs”, ha explicado el páramo jefe.
En este sentido, desde el inicio de las excavaciones arqueológicas se ha acreditado el barrio de San Pablo del Mercadal, donde desde 1174 cada jueves se reunía mucha población para comprar y vender sus productos, y que además incorporaba una zona de entierros muy importantes, según el alcalde.

Las excavaciones arqueológicas han permitido “muchísima información de carácter de base histórica y para conocer un poco más de nuestra histórica que nace de la antigua Ilerda romana que llega hasta el siglo XIX”. Finalmente, el páramo jefe ha agradecido la labor del equipo de arqueología municipal y la concejalía de urbanismo, y ha animado a que “a partir de ahora la obra pueda avanzar al ritmo que está previsto y sea un proyecto de futuro que de alguna manera recordará al pasado”.

Sobre la prevalencia de las estructuras que se han encontrado, Larrosa ha confirmado que quedarán totalmente tapadas por la nueva estación y “quedará para la historia lo que hay debajo, quedarán documentadas y de aquí a muchos años sabrán que todo esto está documentado”. Las piezas que se han encontrado ya se están instaurando por parte del laboratorio de la Universidad de Lleida y el alcalde ha recordado que cuando se avance en el proyecto del Museo de Historia en la ciudad “tendrá su espacio de proyección”.

Un tesoro en las obras de la nueva estación de autobuses de Lleida: 115 monedas del siglo XII
Hace unos meses los trabajos de excavación también descubrieron un pequeño tesoro oculto de 115 monedas de billón, hechas de cobre y plata y que datan del siglo XII, de la época del reinado de Alfonso y de Aragón, el Bataller, entre 1115 y 1134. En la parte de delante se puede ver el retrato del rey y en el reverso la marca de Aragón.
Las monedas estaban envueltas con una tela de ropa dentro de una jarra de cerámica, que también se está restaurando.
Según Xavier Bofarullo, también arqueólogo municipal, “el ocultamiento se habría podido producir durante el ataque cristiano a la ciudad musulmana de Lleida por parte de Alfonso I de Aragón, en 1134”.
En los últimos días también han identificado una trinchera de la Guerra del Francés y se han recuperado dos piedras hogueras y una bayoneta de un mosquetón.
Ahora documentan todos los hallazgos, y una vez terminada la excavación los materiales se incorporarán al Archivo Arqueológico de Lleida para continuar estudiando la historia de la ciudad.