El alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, acompañado de la concejala de Cultura y Promoción de la Ciudad, Pilar Bosch, recibió ayer a varios miembros de la familia Cortada con motivo del 100º aniversario de la empresa JCA Cines.
Durante el acto, celebrado en el Salón del Retablo, el párpuso su papel como referente en el mundo de la cinematografía de las tierras de Lleida.
Con este pequeño homenaje, el Ayuntamiento de Lleida “quiere reconocer la contribución de Jordi Cortada y del conjunto de su familia a través de la empresa JCA Cines a la cultura y a la difusión del cine en nuestra casa”, concluyó el párroco jefe.
El acto también contó con la presencia de la teniente de alcalde Begoña Iglesias así como de los concejales David Melé, Anna M. Florista y Anna Costa.
Jordi Cortada, un pronombre de la cultura en Lleida
Como niño, ya llevaba a cabo algunas tareas para la empresa familiar, el Teatro Victoria, que su madre, Carme Argilés i Vives, puso en marcha hace cien años, en 1923.
Durante la Guerra Civil, Jordi Cortada y su familia sufrieron en primera persona los efectos de esta contienda. Él mismo tuvo que ayudar a sacar cuerpos entre los escombros que dejó el bombardeo del Liceo Escolar.
Aparte, el Teatro fue confiscado por la Generalitat y, posteriormente, lo recuperaron aunque no lo pudieron reabrir porque los bombardeos franquistas lo destruyeron en buena parte.
Después de ir a la guerra y huir a Francia, Jordi Cortada regresó a Lleida. Es entonces cuando la familia reconstruye el Victoria y se hace con la gestión del teatro Principal, que se convierte en un icono del espectáculo de la ciudad.
La empresa se extiende con la gestión de los cines Rambla y las multi-salas JCA en Alpicat y en Valls, que son el epicentro de la actividad de la empresa, con un total de 25 salas.
Jordi Cortada fue distinguido con el premio Sant Jordi de Cinema y con la medalla Macià. Murió en 2008, a los 87 años, y unos años después, el Ayuntamiento de Lleida le dedicó una calle, en el barrio de Cappont.
