Por segunda noche consecutiva, los campesinos de Poniente han encendido fuego con botes de parafina cerca de los árboles frutales para defenderlos de las heladas. Las previsiones de heladas para este fin de semana causaron preocupación en los campesinos de las comarcas de Lleida ante los posibles daños que pueden provocar en frutales y almendros, que además están en plena floración. Durante estas noches del fin de semana las heladas han sido poco severas y los campesinos han hecho su trabajo para controlar los termómetros, algunos de los cuales esta madrugada han bajado por debajo de los cero grados.
Ante esta preocupación, los agricultores han instalado quemadores por las fincas para intentar subir la temperatura y activar el riego por aspersión, un sistema con el que se crea una capa de hielo encima de los árboles para tratar de proteger del frío unos frutos que ya están en fases tempranas de crecimiento. Sin embargo, se espera que las afectaciones sean mínimas o inexistentes, según han explicado a la ACN representantes de las organizaciones agrarias Asaja y Unió de Pagesos.
Según Agricultura, las heladas podrían haber afectado parcialmente a la producción o a la calidad en alguna parcela o zona concreta, pero la consejería apunta que, a estas alturas, los posibles daños no se pueden observar y habrá que esperar a la evolución de las afectaciones en las próximas horas y días.
Durante la noche, para protegerse de las heladas, los campesinos de Poniente han encendido hogueras entre los árboles y frutales, una técnica que ayuda a mantener la temperatura por encima de los 0ºC y evitar daños en las cosechas.
Segona nit seguida en què els pagesos de Ponent encenen foc
amb pots de parafina a prop dels arbres fruiters per defensar-los de les glaçades
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— Projecte 4 Estacions (@P4Estacions) March 17, 2025