Este mismo martes, el teniente de alcalde Carlos Enjuanes informó de que el Ayuntamiento de Lleida deberá volver a ubicar en el pabellón 3 de la Feria el dispositivo para acoger temporeros sin techo durante la campaña de la fruta.
La plataforma Fruta con Justicia Social ha lamentado que se paralizara la construcción del albergue en Pardinyes, y ha criticado al gobierno municipal de la Paeria “porque si se hubiera construido el albergue este verano, no estaríamos hablando ni de módulos ni del pabellón”.
Llibert Rexach, miembro de la plataforma Fruta con Justicia Social, ha tachado “de imprudencia e irresponsabilidad” el hecho de detener un proyecto como el albergue cuando todavía no había confirmada la existencia de los módulos.
No obstante, ha valorado positivamente la creación de estos módulos, aunque también ha dicho que “mientras estamos hablando de propuestas, los temporeros todavía duermen en un pabellón que es indigno. El problema es que los temporeros no son una emergencia porque sabemos cada año que vendrán, y cada año pasa lo mismo”.
Por otro lado, la plataforma cree que hay una cuestión importante entre los temporeros con contrato y sin contrato. ” Los temporeros con contrato debería acogerlos el propio empresario. La ley dice que si contratas a un trabajador de más de 75 km de su casa, deben ser las empresas quienes los acoja“, ha afirmado Rexach.
Actualmente, ya existen empresas agrarias que lo están haciendo con viviendas propias, como es el caso de empresas grandes, como Nufri o Actel y Fruits de Ponent, que ya tienen sus propios albergues.
Aparte, lo que también hacen los pequeños campesinos es pagar ellos mismos una cantidad de dinero al pueblo donde residen, para que se construya un equipamiento por parte del Ayuntamiento, ya que los pequeños agricultores no tienen la capacidad para construirse un albergue propio.
En este sentido, Llibert Rexach habla “de estafa” y de “competencia desleal para el pequeño campesino” cuando las administraciones son las que deben acoger a las personas que llegan sin contrato. “En el pabellón acogemos a todos, gratuitamente y pagado con dinero público. Me parece una estafa porque con dinero público se está pagando alojamiento que deberían ofrecer otras empresas”.
“El ayuntamiento incluso tiene conocimiento de que hay empresas de la franja que llevan sus trabajadores a la Feria porque así se ahorran tener que pagarles el alojamiento. Todo esto es una competencia desleal para el pequeño campesino, porque ellos se esfuerzan en tener 5 plazas para sus trabajadores, que habilita su casa en el pueblo para que puedan dormir, pero hay otros que lo hacen gratis”.
Por otro lado, Fruta con Justicia Social critica que los datos de ocupación del año pasado en el pabellón de la Feria muestran que “superaron la ocupación de las 122 plazas. Y encima este año recortan 22, que no es un drama, pero estas veintidós dormirán en la calle.. A nadie le haría gracia dormir en la calle”.
Rexach también se muestra crítico con el pabellón 3 de la Feria, aunque ofrece los servicios básicos a los temporeros, pero afirma que las personas “son tratadas como si fueran niños pequeños. Tienen una hora de cena, hora de ducha… y ellos necesitan lo que necesita todo el mundo, una vivienda digna, no un albergue de colonias. El pabellón tiene deficiencias de trato y autonomía”.

De esta manera, Rexach propone “que todos los concejales y concejalas de los diferentes grupos políticos municipales les invitamos a pasar allí todo el verano, a ver si quieren”.
Finalmente, Rexach habla “de una contradicción muy bestia por parte del Ayuntamiento. Estos días, con las movilizaciones de los ganaderos y campesinos , todo el mundo, incluso la Patria, ha apoyado al campesinado. Pero la revuelta campesina también son estas personas, porque sin estas personas no habría campesinos”.
El Ayuntamiento de Lleida presentó en octubre el nuevo Modelo de Inclusión
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Lleida presentó a finales de octubre el nuevo Modelo de Inclusión para la ciudad que fijaba la alternativa al albergue para temporeros que defendía el anterior equipo de gobierno de ERC y Junts.
El proyecto supondrá una inversión por fases de 11 millones de euros en cinco años que servirán para atender a temporeros y personas sin techo. Así, el nuevo modelo proponía ubicar a las personas temporeras en cuatro módulos prefabricados instalados en zona agrícola. También contemplaba habilitar espacios para personas sin techo en el edificio del convento de las Josefinas y en la escuela Balàfia, que este año ha quedado en desuso.
“Yo espero que en el mes de junio el modelo de temporeros esté absolutamente ninguneado. No habrá que utilizar el pabellón ferial, en principio”, decía el alcalde, Félix Larrosa, hace exactamente un mes.
Ahora, el modelo que se plantea es un dispositivo de urgencia y primera acogida en la ciudad que ofrece servicios de alojamiento nocturno, con 100 plazas, desayuno y cena, duchas, consigna y autobugadería, además de hacer un acompañamiento y vigilancia de la salud de las personas atendidas.
En este sentido, Rexach ha afirmado que “en junio no habrá nada, porque la administración tiene que pedir permisos y es un proceso muy lento entre administraciones. Pero él no fue tan lento cuando la primera semana de entrar en el cargo se cargó el equipamiento a Pardinyes. Fue la primera decisión que hizo”.