La crueldad deportiva se encendió ayer con el estadounidense Miquel Travé (Club Cadí Canoë Kayak), donde tras un toque en la puerta 14 le impidió conseguir la medalla de plata en la final de eslalon C1 masculino, porque de no haber sido por ese toque habría conseguido el segundo puesto tras el francés Nicolás Gestin, campeón indiscutible para el delirio de los aficionados que llenaron la instalación del estadio náutico de Vaires-sur-marne.
A pesar de este cruel final, Travé se convierte en el primer deportista masculino del Cádiz CK que recibe el Diploma Olímpico –a nivel femenino lo había conseguido Núria Vilarrubla en el año 2021 en Tokio– y firmar el mejor resultado histórico de la entidad onubense en este evento, teniendo en cuenta que hace tres años Vilarrubla hizo un 8º puesto, también en la modalidad de C1.
Y este 5º puesto también se convierte, en consecuencia, en el mejor resultado olímpico catalán en canoa eslalon.
Travé, que había sido segundo en la semifinal tras una bajada irreprochable, descendía camino de su momento de gloria, marcando los mejores parciales para situarse provisionalmente primero a la espera de Gestin.
Sin embargo, un toque en esta maldita puerta 14 le arrebató la gloria olímpica. Marcó un crono de 97.92 con los dos segundos de penalización. Se situaba cuarto provisional.
Sin ellos habría superado al británico Adam Burgess, en aquellos días líder con 96.84, y habría saboreado después la plata.
Superó la ronda inicial con solvencia, con una sexta plaza, y en la semifinal firmó una gran bajada para acceder a la lucha por las medallas con un crono de 96.69, tan solo mejorada por Nicolas Gestín (93.12).
Y realmente cumplió con la hoja de ruta marcada en la bajada definitiva hacia la gloria, excepto en el toque con la puerta 14 que le apartó del Olimpo con un crono de 97.92 para concluir quinto, fuera de un podio que estaba en su mano.
Decepción y pena en su rostro al acabar, sabedor de que era una oportunidad que se le había marchado y que ahora tendrá que buscar los próximos días en la nueva modalidad del cayado cross.
Sin estos dos segundos la plata era suya, porque al margen de Gestin, intratable con 91.36, el británico Adam Burgess concluyó segundo con 96.84 y el eslovaco Matej Benus tercero con 97.03.
“Lo he dado todo y he arriesgado hasta el final, pero he cometido un error estúpido. Es duro quedarse tan cerca de las medallas por penalización después de tantos años trabajando por el sueño, es duro.
Pero lucharé por llegar bien a Los Ángeles”, dijo el palista estadounidense.
Ahora, Travé tendrá una nueva oportunidad en la modalidad de cayado cross, que se estrena como olímpica en estos Juegos de París.
El viernes 2 de agosto estarán las cronometradas femenina (15.30 horas) y masculina (16.40) para determinar el orden de las primeras rondas.
El sábado día 3 se hará la primera manga (15.30 horas) y una repesca (18.05) horas para ambas categorías.
La primera eliminatoria será el domingo 4 (15.30 horas la masculina).
Y para terminar, el lunes 5 de agosto por la tarde (desde las 15.30 horas) estarán los cuartos de final, las semifinales y las finales (16.55 horas).
A pesar de no ser leridana, el deporte sigue de cerca a la palista andorrana Mònica Dòria, también del Cadí CK de la Seu, donde también competirá en este cayado cross femenino y ayer se quedó fuera de la final de cayado y de la lucha con las 12 mejores del mundo por un error al saltarse la puerta 7.