Éxito de la iniciativa en las escuelas de Tàrrega para ayudar a aprender catalán a los familiares de los recién llegados

Foto del avatar
Sessions per ajudar a aprendre català als familiars de nouvinguts a Tàrrega

Dos de las escuelas públicas de Tàrrega han puesto en marcha este curso una iniciativa que ofrece espacios de encuentro para practicar el catalán a familiares de los alumnos de los centros educativos. En concreto, la propuesta tiene lugar en las escuelas Jacint Verdaguer y Maria-Mercè Ribagorçana, que ya cuentan con doce voluntarios que ayudan a mejorar el idioma a un total de diecinueve participantes que se han interesado en el tema, todas ellas madres recién llegadas de alumnos.

En el caso de la escuela Jacint Verdaguer ya hay doce madres que quieren aprender catalán y doce voluntarios que se ofrecen a enseñar la lengua. La propuesta surgió cuando el centro abrió un formulario dirigido a los familiares de los alumnos para buscar voluntarios que ofrecieran actividades en el centro y se encontraron con una alta demanda de clases de catalán. Posteriormente, se adhirieron al programa de voluntariado por la lengua (VxL) impulsado por el Consorcio para la Normalización Lingüística (CPNL) y este mes de febrero han comenzado los primeros encuentros.

Cada día de la semana se reúne un grupo diferente, de 9 a 10 de la mañana, justo después de haber dejado a los niños en el centro. Los encuentros se realizan en el comedor de la escuela, donde los participantes pueden disfrutar de unas pastas y té o café para amenizar la charla, y repasan léxico popular y construcciones de frases en catalán que les puedan servir para el día a día.

Los primeros resultados son muy positivos y el director de la Escuela Jacint Verdaguer, Manel Rodríguez, explica que “hay muchas ganas de aprender el catalán. Viene gente que casi no conoce el idioma y otras que quieren mejorar su base. La idea es que rompan el hielo y puedan utilizarlo en situaciones prácticas en la escuela o en la vida cotidiana como, por ejemplo, para ir al mercado.

La mayoría de los voluntarios son madres o padres de alumnos, pero también hay un abuelo y un exestumante del centro que se ha querido sumar.” Está previsto que las sesiones duren diez semanas del segundo trimestre y, posteriormente, se valorará si se repite la iniciativa en función de la demanda.

En la Escuela Maria-Mercè Ribagorçana, la Asociación de Familias de Alumnos (AFA) organiza un encuentro lingüístico a la semana con uno o dos grupos, según la asistencia y el nivel de conocimiento del idioma. En su caso, el proyecto comenzó a principios de curso con el objetivo de facilitar la adaptación a familias recién llegadas y mejorar la fluidez del habla catalana a los familiares interesados.

Actualmente, cuentan con seis mujeres participantes y un grupo de seis voluntarias con tres madres y tres padrinas de niños y niñas de la escuela. Paula Pallarès, miembro de la AFA de la escuela, explica que las madres que forman parte de los encuentros “quieren aprender la lengua que hablan sus hijos y encontrar maneras de poder integrarse en la sociedad. La idea surgió de una propuesta que recibimos el curso pasado de Òmnium Cultural para ofrecer espacios de intercambio en catalán. En ese momento lo vimos difícil, pero fue la semilla que nos ha permitido activarlo este año y estamos muy satisfechas. La idea es que sea una actividad de continuidad y que se pueda ofrecer este espacio a las personas que lo necesiten.”

Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticia anterior
Begoña Iglesias contracte neteja Lleida

Lleida implantará el nuevo contrato de limpieza el 1 de enero de 2026

Siguiente noticia
roses carnaval 2024

Carnaval 2025 en Roses: Pasadas, la arrasada, pasacalles y mucha fiesta

Noticias relacionadas