Unas 150 personas se concentraron este fin de semana, la tarde del sábado, en la plaza Mayor de Cervera para condenar una agresión homófoba en el exterior de una discoteca de la ciudad la semana pasada y que acabó con ingreso hospitalario. La concentración estuvo organizada por el Ayuntamiento y otras entidades de la capital de La Segarra y se hizo lectura de un manifiesto. Según el documento, los hechos ocurrieron el 31 de mayo cuando un grupo de más de quince personas agredieron físicamente a la víctima, la cual requirió ingreso hospitalario por lesiones renales y contusiones en diferentes partes del cuerpo. Los concentrados también mostraron el compromiso “para seguir luchando contra los prejuicios y brotes de fascismo que cultivan mensajes de odio”.
El alcalde de Cervera, Jan Pomés, tachó “de intolerable” a cualquiera de agresión en un municipio como Cervera “donde se fomenta y se trabaja por una sociedad democrática libre”. En este sentido, Pomés explicó que la concentración de este sábado es una muestra de la firmeza de los cerveceros para luchar “por la población que queremos”. “La intolerancia no tiene cabida en nuestro municipio”, concluyó.