La lluvia que ha caído este viernes por la noche en Lleida ha obligado a la Congregación de la Purísima Sangre a cancelar la procesión del Santo Entierro de la capital del Segrià, una de las más multitudinarias que se celebran en el marco de la Semana Santa en las comarcas de Poniente. De esta manera, las diferentes cofradías participantes en la procesión han movido de manera simbólica algunos de los once pasos dentro de la iglesia de la Sangre, llena de personas curiosas y devotos, los cuales se han mostrado visiblemente emocionados por la cancelación del acto. Asimismo, algunas de las cofradías también han tocado marchas procesales.
La procesión del Santo Entierro de Lleida tenía que dar el pistoletazo de salida a las nueve y media de la noche de la iglesia de la Sangre para recorrer la avenida Cataluña, las calles Lluís Companys, Unió, Templers, Acadèmia, República del Paraguai, Alcalde Costa, la avenida Blondel y las calle Vila de Foix para volver al punto de salida. La cancelación se ha producido poco después de la hora de salida por la lluvia y las personas que tenían previsto seguir la procesión se han reunido dentro y fuera del templo.
Aunque la Congregación de la Purísima Sangre ha dado un cierto margen de tiempo para ver si paraba de llover, finalmente ha optado por no sacar las once escenas que tenían previsto lucir por las calles centrales de la capital del Segrià, en un recorrido encabezado por los Armados de la Sangre, que este año estaban acompañados de una charanga con más músicos que en ediciones anteriores.
Otra de las novedades de la procesión de este año era el estreno de la nueva marcha de Antoni Josep Albuquerque de la mano de la Banda Municipal dedicada a la Virgen de la Soledad, patrona de la iglesia de la Sangre. Por su parte, la cofradía de la Merced Padres Mercedarios tendrá que esperar al próximo año para salir en esta procesión con el paso de la Flagelación, restaurado en el marco del 75 aniversario.
