El Ayuntamiento de Vilanova i la Geltrú ha dado más altura al muro del torrente de La Piera, en un tramo de 130 metros al paso inferior a la vía de tren. El objetivo de la obra es reducir los desbordamientos en la ronda de Europa en caso de lluvias de intensidad elevada. Esta es una de las actuaciones a corto plazo para paliar los efectos de las cada vez más frecuentes lluvias intensas, características del clima mediterráneo.
El concejal de Servicios Urbanos, Gerard Llobet explica que “haciendo estas pequeñas actuaciones de ir garantizando la funcionalidad que debe tener un torrente, evitamos que se desborde y hagamos que llegue el agua en las mejores condiciones a mar”. Desde la constatación en los últimos años de que estos episodios meteorológicos son cada vez más frecuentes, VNG está reforzando la prevención con medidas a corto, medio y largo plazo para paliar el impacto de posibles avenidas de agua.
La obra debajo del puente de la vía ha consistido el recarimiento de un tramo de 130 metros lineales del actual muro que separa el torrente del vial, utilizando bloques de hormigón y barras de acero ancladas con resina. En los últimos cinco años, entre junio de 2018 y septiembre de 2024, el torrente ha rebosado hasta ocho veces, causando afectaciones a la circulación, con cortes de tráfico y vehículos atrapados por el agua, y acumulación de ramas, desechos y barro en la calzada. Aunque existe una estación de bombeo con tres bombas de 9 kW, éstas sólo tienen capacidad para drenar el agua que se acumula en la ronda, y son inoperantes en caso de desbordamiento del torrente dado que extraen de la ronda caudal que el torrente vuelve a incorporar.
La mejora del tramo final del torrente de La Piera también fue uno de los temas tratados en la reunión del alcalde y miembros del gobierno de VNG con la directora general de Puertos de la Generalitat, Esther Roca, la semana pasada. Los representantes municipales pidieron a la administración catalana que se implique en la mejora de la desembocadura, que sufre acumulación de sedimentos por los efectos de las instalaciones portuarias. Gerard Llobet adelanta que “la idea sería seguir interviniendo, seguir trabajando en los sedimentos, es un torrente que tiene bastante acumulación de sedimentos”.
Mantenimiento de los torrentes
Vilanova i la Geltrú tiene tres torrentes que atraviesan el municipio, el torrente de Sant Joan al oeste, el torrente de La Pastera y los torrentes de Santa Magdalena y de La Piera al este. Tres veces al año se lleva a cabo la limpieza de los tramos de los cauces que transcurren por el núcleo urbano con el fin de garantizar su correcto funcionamiento hidráulico, desbrozando la vegetación no autóctona o invasora, y retirando árboles caídos.
Las intervenciones de mantenimiento se realizan en enero/febrero, el mes de mayo y en septiembre. En el último episodio de lluvias intensas se ha podido comprobar que las tareas de limpieza combinadas con el levantamiento del muro han dado un resultado satisfactorio.
Reducir el riesgo de inundabilidad
La ACA, la Agencia Catalana del Agua, en su Plan de gestión del riesgo de inundación incluye tres TRI (Tramo con el Riesgo de Inundación) en el término municipal, que son los tramos finales de los torrentes de La Piera, de La Pastera y de Sant Joan dentro del núcleo urbano. Estos estudios de inundabilidad determinan la probabilidad y el grado de afectación por inundación y recogen las medidas orientadas y las inversiones programadas con el objetivo de reducir y prevenir los efectos provocados por estos episodios.
En este sentido, el Ayuntamiento propuesta dos intervenciones. La primera, sobre el torrente de La Piera para rebajar el nivel del cauce y aumentar la capacidad hídrica del torrente, ya que con el paso del tiempo esta capacidad ha ido disminuyendo por el arrastre y deposición de sedimentos. El proyecto también incluye potenciar la función del torrente como corredor biológico y parque fluvial. “Este torrente está incluido en sectores de crecimiento futuros y lo que se están planteando son medidas como renaturalizar, hacer que los torrentes sean un parque fluvial” explica Gerard Llobet, “que tengan bases de laminación por retención de aguas, todo ello acompañado con alguna obra hidráulica como el trasvase de torrentes”.
La segunda propuesta es mejorar la permeabilidad del torrente de Sant Joan hacia el subsol.
Planificación a largo plazo
Otro proyecto que está planteado, más a largo plazo, es la ejecución del tramo que carece del trasvase de torrentes, que permitiría sacar carga del torrente de La Pastera, que discurre por el centro de la ciudad, y trasladarlo al de La Piera.
También se plantea la necesidad de disponer de un plan director de alcantarillado. Este estudio indicaría los puntos débiles en caso de aguaceros, y ayudaría a determinar los puntos donde construir depósitos. Actualmente, la Compañía de Aguas ya ha realizado parte relevante del trabajo de campo y tiene previsto la finalización del plan en los próximos meses.
El Plan General de Ordenación Urbana de 2001 identifica los cursos de agua y las áreas inundables del municipio, definiendo riesgos en un ámbito ajustado a un periodo de retorno de quinientos años y también determina la protección, como mínimo, en una distancia de 10 metros a ambos lados de los márgenes superiores de los cursos de agua.
En el marco de la redacción del nuevo POUM el objetivo es disponer de un estudio de inundabilidad del municipio adaptado a la realidad actual y futura de la ciudad. “Este es uno de los retos que tenemos también en el futuro plan general de ordenación” dice el concejal de Servicios Urbanos, “incorporar este vector del cambio climático y aquí el nuevo POUM sí incorporará un estudio global de todo el municipio de inundabilidad porque lo marcan ya las nuevas normativas”.
Medidas de prevención
El Ayuntamiento de Vilanova i la Geltrú trabaja para que la población tome conciencia de que nos encontramos en un momento de cambio climático, que nos trae fenómenos adversos más frecuentes, y que, por tanto, hay que aumentar las medidas de prevención. En este sentido, el municipio dispone del Documento Único de Protección Civil, el documento que marca los protocolos de actuación en caso de prealerta, alerta y emergencia.
Otras acciones de prevención previstas son, por ejemplo, una comunicación a todas las propiedades situadas en zonas inundables del municipio para recordar que no está permitida ninguna construcción en estos terrenos.