En una rueda de prensa celebrada el lunes en Cadaqués (Alt Empordà) el diputado de la CUP, Dani Cornellà, y el miembro de la Assemblea per Cadaqués, Xesco Vallverdú, acusaron al equipo de gobierno local y a la alcaldesa, Pia Seriñana, de presunta vinculación con viviendas de uso turístico (HUT) ilegales en el municipio.
Los cupaires aseguraron que Cadaqués tiene 280 HUTS, superando con creces el máximo de licencias que marca la legislación catalana y que 80 de estos operan sin permiso. Entre los huts 'fuera de la ley' muchos están vinculados a personalidades del municipio, como la misma alcaldesa o familiares de Pilar Rahola.
La CUP también afirma el uso clientelar que se hace de las administraciones para favorecer intereses particulares. 'Mientras los habitantes del pueblo no podemos acceder a una vivienda digna, las autoridades permiten que sus propios pisos se conviertan en negocio especulativo y fuera de la ley'.
Afirman los cupaires que 'el gobierno municipal es puro cinismo'. El equipo municipal, afirman, se llena los bolsillos.
RESPUESTA DE LA ALCALDESA
La alcaldesa de Cadaqués, Pia Seriñana (Fem Cadaqués), por su parte, ha reaccionado rápidamente y con contundencia ante las acusaciones de la CUP, las cuales ha tildado de “infundadas, fuera de lugar y totalmente falsas”.
En un comunicado difundido este mismo lunes, Seriñana niega cualquier vinculación con pisos turísticos ilegales y asegura que la vivienda a la que hace referencia la CUP es el domicilio particular de su hija.
Seriñana ha recordado que el Ayuntamiento de Cadaqués trabaja desde el mes de junio en una campaña intensiva de inspección para detectar viviendas turísticas sin licencia. Esta tarea, coordinada por una persona específica y en colaboración con la Generalitat, ya ha permitido identificar más de un centenar de pisos con posibles irregularidades, actualmente en proceso de investigación.
Serinyana, finalmente, ha añadido que el acto por parte de miembros de la CUP de acceder al domicilio particular de su hija es "una vulneración de privacidad y un escarnio".
LA CUP, INSISTE
Los cupaires han denunciado que la situación de irregularidades es 'estructural' y que el pueblo sufre una masificación turística que “encarece la vivienda y expulsa a los vecinos”.